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Apenas quedan restricciones de la pandemia, farmacias y centros sanitarios son las reminiscencias de las mascarillas. Ya no hay que guardar cuarentenas si los síntomas son leves ni para los que están en contacto con contagiados. Es decir, que te puedes ir por ahí contagiando a quien sea. Pero quiero hacerles ver que esto no se ha acabado. Aunque sea difícil obtener los datos del Covid, les puede confirmar que esta última semana los datos oficiales para mayores de sesenta años están en esta última semana en los 256 muertos( DOSCIENTOS CINCUENTA Y SEIS).
Ya no sabemos el número de contagiados porque , como decía, los leves no tienen porqué hacer cuarentena y, por tanto, nadie se entera. Queda a la responsabilidad de cada uno. Ya no hay restricciones, quedan muy bien sólo con las recomendaciones y tú te las arreglas.
Y ahora nos encontramos ya de lleno en unas fechas muy esperadas del año para los campogibraltareños y andaluces en general. Es la Semana Grande, la Semana que se ha hecho esperar durante un año entero y que la tenemos ahí ya.
Pero con todos los preparativos ya listos, con hermandades que ya lo tienen todo ultimado, creo que es el momento que nos llamemos nosotros mismos a la prudencia porque la clase política ya pasa olímpicamente del tema.
Aunque son una gran mayoría los vacunados serán muchos los momentos en los que habrá bullas, contacto, proximidad. No tenemos que masificar los sitios, usemos mascarillas porque todo es poco ya que a pesar de lo quieran hacernos ver, la pandemia no se ha acabado. El riesgo está ahí y no podemos mirar hacia otro lado y dejarnos llevar.
Todos conocemos los sitios conflictivos de nuestras ciudades. Disfrutar de nuestra Semana Santa pero con cabeza.
Sólo espero y deseo de corazón que tras estas fiestas no haya que lamentarse por haber cometido imprudencias, que el sentido común impere, que se imponga la razón de cada uno y que cuando estemos contemplando a las Sagradas Imágenes por nuestras calles, también elevemos una plegaria, un rezo, por todos aquellos que no están y que se los llevó el coronavirus.
Vamos a ser prudentes porque todo depende, como siempre, de nosotros.
Mucha suerte a todos.
Patricio González