Más de 150 personas se dieron cita en los hermosos jardines de la prestigiosa Clínica para disfrutar del concierto benéfico a favor de la Fundación Cudeca – Cuidados paliativos del Cáncer y otras enfermedades en fase avanzada y terminal, con la actuación estelar del conjunto de Jazz Juan Galiardo Quartet.
A la llegada los asistentes fueron distinguidos con la flor símbolo de la Fundación Cudeca. El acto comenzó con la bienvenida del director general Claus Rohrer quien agradeció a Cudeca su admirable labor «es una gran satisfacción para nosotros tener la oportunidad de colaborar y donar todo el dinero recaudado en tan importante tarea, como es la actuación a pacientes de cáncer en cuidados paliativos» señalaba Rohrer quien finalizaba destacando los efectos positivos de la música para la salud «Creemos firmemente que la música es muy saludable, los sonidos despiertan las emociones, alegran el corazón y alimentan el alma» concluía el gerente.
Por su parte la responsable Financiera de Cudeca, Assumpta Eceiza, puntualizó que además se cumplía el décimo aniversario de la colaboración entre Cudeca y la acreditada Clínica, «esperamos que con la ayuda de Buchinger Wilhelmi Marbella podamos seguir muchos años más ofreciendo estos excelentes conciertos solidarios para el bien de nuestra fundación y el deleite de los asistentes» concluyó Eceiza.
En cuanto al repertorio musical ofrecido, el conjunto Juan Galiardo Quartet, sedujeron al público con un recital de quince temas donde se entremezclaban composiciones originales propias, algunas incluso aún sin publicar, y piezas muy representativas del Jazz clásico internacional. «Se trata de un Jazz muy melódico, suave y relajante, muy apropósito con el lugar y la causa» comentaba el pianista Juan Galiardo.
La Clínica Buchinger Wilhelmi organizó este evento de manera totalmente gratuita, con el objetivo de recaudar fondos para apoyar a la fundación Cudeca y que esta pueda continuar su admirable labor y mejorar la calidad de vida de los enfermos de cáncer y de sus familiares.
El hermoso jardín de la Clínica lucía de forma espectacular. El amplio escenario se había instalado en el centro del mismo rodeado por los alcornocales de los que colgaban farolas con velas creando el ambiente adecuado para disfrutar de este recital benéfico. Los asistentes tuvieron la oportunidad de degustar también los exquisitos zumos naturales de la Clínica.