El alcalde de Manilva, Mario Jiménez, acompañado del concejal y delegado de la oficina técnica en Mancomunidad, Marcos Ruiz ha mantenido varios encuentros en la sede del ente mancomunado, en los que se ha tratado como tema central el Plan Estratégico de la Costa del Sol.
Hace diez años, en 2007, se firmaba el primer documento referente al Plan estratégico de la Costa del Sol, en el que se formularon una serie de propósitos que debían alcanzarse. Este plan ha servido para ver como se han conseguido objetivos que eran impensables en aquellos años.
Pasada una década es el momento de sentarse de nuevo, para valorar la situación actual tras una fuerte crisis y ver el grado de cumplimiento de los objetivos principales, así como formular los que no fueron entonces tenidos en cuenta o aquellos que ya hoy no se consideran relevantes.
Este nuevo estudio prospectivo socioeconómico para la Costa del sol Occidental, debe entenderse como un instrumento de planificación global en el contexto de la actividad de la Junta de Andalucía y la política Europea de Cohesión, referente al nuevo periodo de los fondos europeos para nuestra comunidad, incluido en el marco de estrategia Europa 2020 y orientada al crecimiento inteligente, sostenible e integrador.
En este sentido se debe enfocar, dice el documento, hacía políticas de crecimiento económico y generación de empleo desde un nuevo prisma, así como se debe poner en valor los recursos con los que cuenta Andalucía, al tiempo que se preservan los derechos de la ciudadanía propios del estado de bienestar.
Según comentaba el primer edil, con esta iniciativa se pretende crear una visión más global y estratégica de futuro de la costa del sol, en la que todos los municipios puedan poner sobre la mesa lo que pueden aportar al conjunto.
Los representantes se han emplazado para la segunda quincena de marzo, a fin de que los municipios que integran este plan, puedan reflejar su aportación al contexto global.
A través de las reuniones futuras se estudiarán diferentes contenidos, como la disponibilidad de recursos e infraestructuras, los factores potenciadores de crecimiento, donde se incluyen aspectos tan importantes como la desestacionalización del turismo o las nuevas ofertas de servicios, los impactos económicos y laborales de los nuevos proyectos que deben implantarse, objetivos a medio y largo plazo, así como las necesidades de inversión y actuación, que estarán recogidas en una memoria económica.