El consejero de Empleo, Empresa y Comercio de la Junta de Andalucía, Javier Carnero, ha revelado que un tercio de las 150 empresas foráneas instaladas en Andalucía durante los últimos cinco años eligió como sede a la provincia de Málaga. Este dato, revelador de las oportunidades que ofrece la comunidad autónoma como destino inversor, se ha expuesto en el transcurso de una conferencia-coloquio encuadrada en la iniciativa Fórum Europa, donde Carnero ha efectuado un diagnóstico sobre las fortalezas de la comunidad autónoma andaluza como destino inversor. El acto, celebrado esta mañana el Gran Hotel Miramar de la capital malacitana, ha congregado a unas 300 personas, entre ellas empresarios, directivos, jóvenes emprendedores y autoridades de diversos ámbitos.
El consejero comenzó su intervención recordando que la economía malagueña está protagonizando el mejor comportamiento a nivel regional, tanto en crecimiento económico como en descenso del paro, pues mientras que el primero se ha revisado al alza, pasando del 2,7% al 2,9%, en el segundo, y durante los últimos doce meses, se ha producido una reducción del desempleo que ha beneficiado a cerca de 40.000 personas.
Sin embargo, y pese a las bondades que se derivan de estas cifras, Javier Carnero se mostró muy escéptico con esa afirmación generalizada de que España ha salido de la crisis: Zapatero reconoció como un error haberla negado en 2008, con un 8% de desempleo, un superávit del 2% y una deuda pública del 35%, y una década después Rajoy la da por superada con más de un 17% de paro, un déficit público del 4,3%, un 100% de deuda pública y un crecimiento consolidado de la desigualdad, dijo, antes de constatar que no se puede dar por saldada esta crisis si la recuperación no llega a las familias.
En este sentido, el máximo responsable de la Consejería reconoció que se crea empleo, aunque a costa de los salarios y de la estabilidad: de hecho, la mayoría de los contratos firmados en España durante el último año han sido temporales: Y lo peor que nos puede ocurrir es resignarnos a competir, como lo vienen haciendo las economías emergentes, mediante la devaluación de los costes laborales y del gasto social, añadía, antes de explicar el itinerario que ha trazado el Gobierno Andaluz en beneficio del empleo estable y de la creación de riqueza.
Así, el punto de partida es la concertación, la gobernanza, que en Andalucía se ha convertido en eje vertebrador de las distintas estrategias aprobadas durante el último año, y que permitió consensuar diagnósticos y medidas con los sectores implicados.
Otro paso indispensable fue la reciente aprobación del Proyecto de Ley del Presupuesto de la Comunidad Autónoma, siendo la primera Administración de España en garantizar un acuerdo para sacar adelante sus cuentas, dijo Carnero. Un presupuesto eminentemente social y cercano a la realidad de los andaluces, añadió, que en el caso concreto de Málaga dedican ocho de cada diez euros a materia social, y que promueven el desarrollo en el turismo, las TIC y la agroindustria, principales sectores de la provincia.
Un tercer aspecto de relevancia y eficacia sociolaboral es la reactivación de la oferta de cursos de formación profesional, paralizada en 2012, y para la que el Gobierno va a movilizar unos 65 millones. De ésta podrán beneficiarse más de 4.000 desempleados de la provincia, que hallarán nuevas oportunidades al mejorar su cualificación. A esto, recordó Javier Carnero, se añaden ya y se seguirán añadiendo en el futuro otras iniciativas tendentes a mejorar tanto la cualificación profesional de los ciudadanos en especial de las personas con menos oportunidades- como la generación de empleo.
Entre ellas, el consejero mencionó una nueva convocatoria para proyectos de Escuelas Taller y Talleres de Empleo, dotada con 49 millones; un Programa de Empleo Industrial, con más de 300 millones, que está en fase de elaboración; y una nueva convocatoria del programa Guadalinfo, con 11 millones.
Tras aludir brevemente a la firma del Pacto por la Industria, que tuvo lugar a comienzos de este año, Carnero habló de la creación e impulso de la marca Andalucía es industria, Andalucía es innovación, como vía para generar conciencia social y empresarial, y para difundir las fortalezas sectoriales de esta tierra.
Finalmente, como elemento adicional a todas las medidas expuestas, el consejero relacionó brevemente los programas de incentivos y los distintos planes de apoyo a las empresas, tanto en fomento de I+D+I como en sostenibilidad energética, acceso al crédito, etcétera. Aludió, en concreto, a otras dos iniciativas novedosas: de un lado, la próxima licitación del proyecto Compra Pública Innovadora, que prevé movilizar inversiones desde la colaboración público-privada para acelerar innovaciones tecnológicas en sectores de alta competitividad; y de otro, el lanzamiento de la Estrategia Clúster Andalucía 2017-2020, concebida para consolidar y apoyar a estas agrupaciones empresariales en los ámbitos productivos de mayor interés para la región.
Pese a todo, el titular de la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio reconoció la existencia de algunos obstáculos. Así, recordó que sólo en los últimos dos años la Junta ha destinado cerca de 2.300 millones a reducir las cifras del paro y, frente a ello, desde el Gobierno Central se nos niega reiteradamente un plan de empleo especial, y se nos recortan los fondos para desempleados en un 85%, añadió.
También se refirió al tamaño de nuestras empresas, en un 99% pymes o micropymes: un obstáculo que habrá que superar insistiendo en la colaboración entre empresas, en concreto entre empresas del mismo sector, y generando como ya se hace- espacios y proyectos de colaboración sectorial: Y aquí en Málaga tenemos el PTA para constatar que es una fórmula que funciona, sentenció.
El consejero de Empleo, Empresa y Comercio concluyó su intervención apostando por la unidad y por el diálogo como fórmulas para garantizar el progreso y el futuro.