La izquierda social

Nuestra sociedad hasta el movimiento del 15 M, estuvo en gran parte desmovilizada, y la izquierda social existía más en el plano ideológico y teórico que en el de la realidad. No obstante los momentos que vivimos exigen que al igual que se aglutinó gran parte de aquella movilización en torno a PODEMOS, se vaya resituando en el conjunto de la izquierda política.

Con excelente criterio ese es uno de los grandes objetivos que se ha planteado la actual dirección del PSOE, ser el partido referente de esa izquierda que milita en los movimientos sociales, ecologistas, culturales y en todo el espectro de los distintos sectores que quieren transformar la sociedad.

Si Sánchez, que ha demostrado ser corredor de fondo, lo logra habrá recuperado en gran parte la base social y por tanto una mayoría suficiente para gobernar. Si lo consigue habrá superado en gran parte la crisis de credibilidad de la socialdemocracia española, y hacer que la gente vuelva a escuchar lo que dice y creer lo que hace el PSOE.

Tal vez habrá que convencer a muchos integrantes del socialismo español que el partido es mucho más que la militancia, que es patrimonio de la ciudadanía, que es importante que además de la crítica y la autocrítica seamos capaces de hablar en positivo y poner en valor todo lo que a lo largo de nuestra historia hemos hecho como socialistas, promoviendo políticas progresistas y vanguardistas.

Hay que dejar claro, que a pesar de todas las dificultades los gobiernos socialistas en los ayuntamientos, en las Comunidades Autónomas y en el Gobierno de España han transformado la realidad, y lo que hay que lograr que esa sociedad, esas muchas personas con inquietudes políticas se sientan atraídas por la militancia en el PSOE, además de actuar en los movimientos sociales.

Creo que desde la dirección el socialismo español que ahora gobierna España, ha de entenderse con claridad que en 2018, al final de la segunda década del siglo XXI existe una nueva cultura del activismo político, que hemos de conseguir un PSOE más abierto, con más democracia interna, más debate y más participación.

Un partido que llegue a todos los rincones y a todos los sectores presencialmente y a través de las redes sociales, que las instituciones son solo instrumentos al servicio de la ciudadanía para hacerlos más felices y transformar la sociedad para que ésta sea más justa.

Sería absurdo hacer frente a la sociedad globalizada, porque el mal no está en ella sino en el uso que se hace de la misma y la falta de respuestas por parte de la socialdemocracia europea. Debemos ser capaces no solo de producir buenos diagnósticos, sino de aplicar eficaces soluciones.

Tenemos que hacernos una reflexión y es que nunca ha habido tantas posibilidades de riqueza como ahora, No somos conscientes que con nuestro móvil llevamos el mundo en el bolsillo. Hoy en día, tenemos un grave problema, porque la opción es socialdemocracia o populismo.

En los próximos meses el Gobierno de Pedro Sánchez ha de volver a recuperar la confianza de la izquierda social , y no solo con la necesaria exhumación de los restos del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos, sino lograr aprobar unos Presupuestos para 2019, con contenido claramente progresistas , establecer las bases para la resolución del conflicto catalán y la nueva financiación autonómica , abordar con garantías el tema de las pensiones y la inmigración, entre otros muchos temas. 

Los cambios que la sociedad actual necesita son deseables, no podemos conformarnos con ser gestores, eso lo podrían hacer tal vez un grupo de técnicos, sino que hemos de construir alternativas que sean capaces de movilizar a la sociedad hacia un nuevo tiempo y una nueva ilusión.