La Diputación de Málaga y el Ayuntamiento de Macharaviaya, junto a la comunidad norteamericana de Pensacola, rindieron el martes homenaje de recuerdo a Bernardo de Gálvez en la misma bahía donde tuvo lugar la famosa batalla que propició la liberación de la ciudad, dominada entonces por los ingleses.
Cada año, los amplios seguidores del ilustre militar y diplomático malagueño, que contribuyó de forma notable a la independencia de los Estados Unidos, lo recuerdan como un héroe en el llamado Día de Gálvez, que ofrecen anualmente en su honor en esta ciudad del estado de Florida.
El diputado de Cultura, Víctor González, y el alcalde de Macharaviaya, Antonio Campos, en unión de la cónsul honoraria de España en Pensacola, María Davis, arrojaron al mar una corona de flores con los colores de la bandera española.
Previamente, se ofició un responso a cargo del padre Nick Schumm, seguido de forma muy emotiva por los presentes a bordo de la embarcación Nyhaven, que puso a disposición el prestigioso abogado local Michael Papantonio. Miembros de la Marina norteamericana interpretaron el toque de oración.
Tanto Víctor González como Antonio Campos y el aristócrata, deportista y empresario Álvaro de Marichalar pusieron énfasis en destacar la histórica presencia española en Estados Unidos desde el siglo XVI y los lazos que unen a los dos países.
El diputado de Cultura destacó que Bernardo de Gálvez es la figura que une a Málaga y a Pensacola, a EE.UU. y a España. Al mismo tiempo, adelantó algunos proyectos que tiene la Diputación Provincial para poner en valor la figura de este malagueño ilustre.
Por su parte, el alcalde de Macharaviaya, que es la tierra natal de Gálvez, agradeció la acogida que siempre dispensa Pensacola a los españoles y las distintas iniciativas que desarrolla todos los años, a primeros de mayo, para honrar la memoria de este héroe macharatungo.
Álvaro de Marichalar defendió el orgullo patrio y resaltó que los españoles fundaron un millar de ciudades en EE.UU., entre ellos su antepasado, el soriano Tristán de Luna y Arellano, que a mediados del siglo XVI entró por la bahía de Pensacola y creó la ciudad de Santa María. Una estatua en bronce preside la plaza que lleva su nombre en Pensacola, situada al final de la calle Palafox, junto al puerto.
Distintos representantes de la comunidad norteamericana en Florida agradecieron que instituciones españolas, como la Diputación de Málaga y el Ayuntamiento de Macharaviaya, respalden esos lazos de unión entre las dos ciudades y los dos países. Mostraron orgullosos el origen español de sus antepasados.
Una expedición se desplazará a finales de junio a España para visitar Málaga y Macharaviaya, la tierra natal de Bernardo de Gálvez, al que le profesan una gran admiración.