La Costa del Sol se enfrenta a los próximos años con un Plan de Marketing 2020-2023 que incluye 213 acciones para mejorar su competitividad y con diez objetivos, entre ellos incrementar el empleo turístico de calidad en un 4,46 por ciento anualmente; aumentar el impacto económico generado por los turistas un 3,4 por ciento cada año, situándose en 16.800 millones; y diversificar los mercados, de manera que se reduzca en cuatro puntos la dependencia de Reino Unido y de España.
Así lo ha anunciado en rueda de prensa el presidente de la Diputación y de Turismo y Planificación Costa del Sol, Francisco Salado; acompañado por la consejera delegada de la citada empresa pública de turismo, Margarita del Cid y del presidente de los hoteleros de la provincia y ahora también del Foro de Turismo provincial, Luis Callejón Suñé.
Otros objetivos planteados en este documento, de casi 800 páginas, son que las empresas apuesten por la transformación digital, ya que pese a que no hay datos actualmente en la provincia se estima que el gasto en tecnologías de la información y comunicación en estas empresas es menor al uno por ciento; y que mejore la satisfacción de los turistas en un 1,5 puntos y llegar al 66 por ciento, frente al 64,5 por ciento de los viajeros que se declararon muy satisfechos con el destino en 2019.
La desestacionalización del destino, mejorar las sinergias público-privadas, con 25 reuniones por año frente a las 12 actuales; incrementar las plazas en la comarca de la Axarquía y en el interior y mejorar la sostenibilidad, con cero vertidos al mar y aumentar en un 20 por ciento los hoteles con sellos de gestión ambiental se sitúan también entre los objetivos a cumplir con este plan de marketing.