Mientras tienes otros planes. Esta frase de John Lennon define perfectamente lo que nos está ocurriendo. Cada uno de nosotros teníamos nuestros propios planes y la vida se ha encargado de cambiarlos hasta el punto de que ni en nuestros peores sueños podríamos haber imaginado lo que la vida ha decidido hacer con nosotros. Finalizando la tercera semana de confinamiento y esperando y ampliado este Estado de Alarma otros quince días, se nos paró la vida y los planes que teníamos en ella. Y ahora estamos en casa, con más de trece mil muertos(13.035) y 135.032 infectados. Sólo se nos habla de estadísticas , de picos y de curvas. Pero la realidad es la que es, sin contar con la tremenda crisis económica en la que estamos y lo que nos queda.
Que sí, que es una crisis global. Que se nos dice que hay que estar unidos, pero unidos ya lo estamos porque si no llega a ser por los ciudadanos que están cumpliendo con su responsabilidad, no se dónde estaríamos. Por lo demás, un gobierno que ha entrado mal y tarde, dejando que la pandemia se nos metiera hasta las entrañas sin tomar medida alguna porque tenían otros intereses. También Vox, también el futbol, también Ábalos con su Mascletá en Valencia. Después todo ha ido demasiado rápido y Sánchez ha querido, encima, ir por su cuenta, lo que nos ha llevado al desastre que tenemos. Estoy seguro de que vamos a salir del mismo pero el problema está en ¿Cómo vamos a salir?.
Groucho Marx decía que la política es el arte de buscar problemas, de encontrarlos, de hacer un diagnóstico falso de ellos y de aplicarles finalmente remedios equivocados. No saben qué razón tenía porque en nuestro país los políticos no han estado a la altura a la hora de combatir la pandemia, tanto desde el punto de vista sanitario (improvisación y falta de medios) como del económico. Voltaire dijo que “la política es el camino para que los hombres sin principios puedan dirigir a los hombres sin memoria”.
Y nosotros, confinados, esperando tener un mañana que así será pero, de todas formas y aunque sea de manera virtual, tenemos que consumir más “te quiero”. Más osadía. Más besos. Más llamadas. Más perdón. Más “¿quedamos?”. Más vivas. Más olés. Más música. Más audacia. Más insolencia. Más riesgo. Más determinación. Más cariño. Más ternura. Más sentimiento. Más querer. Que el día menos pensado llega… el futuro. Y nos pilla sin habernos enterado.
Algeciras a 6 de abril de 2020
Patricio González