El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, no ha ocultado su “sorpresa” al conocer, a través del perfil oficial de Twiter de la Junta de Andalucía, que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha aceptado “toneladas” de material de protección contra el Covid-19 elaborado por costureras de Granada. El primer edil ha recordado que la Junta rechazó en su día las mascarillas realizadas por personas voluntarias de San Roque, por lo que ha expresado su malestar y ha pedido explicaciones oficiales.
En el perfil de Twiter de la Junta se recoge lo siguiente: “Toneladas de ayuda tras muchas horas de trabajo incansable. 500 costureras voluntarias fabrican batas, escafandras, patucos y mascarillas en #Granada para vencer al #COVID-19”. Hay que señalar que, desde que comenzó el estado de alarma, las personas voluntarias de San Roque, coordinadas por el Ayuntamiento, han fabricado hasta ahora el siguiente material: 14.218 mascarillas para adultos; 1.000 mascarillas infantiles; 332 batas; y 100 gorros para quirófanos.
Ante esta publicación y el rechazo hace unas semanas por parte de responsables autonómicas en la provincia de Cádiz de las mascarillas elaboradas en San Roque, por considerarlas “no homologadas”, Ruiz Boix ha enviado sendas cartas pidiendo explicaciones al presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla; al consejero de Sanidad, Jesús Aguirre; a la delegada de la Junta en Cádiz, Ana Mestre; a la delegada Territorial de Salud y Familias, María Isabel Paredes; y a la subdelegada de la Junta en el Campo de Gibraltar, Eva Pajares.
El alcalde lamenta que tras haber “canalizado tanta solidaridad para ayudar a los que están en primera línea de batalla (el personal sanitario), sus jefes políticos juegan a la deslealtad o al rechazo de la colaboración por intereses políticos que ahora no deben estar encima de la mesa”. En este sentido, se pregunta “si hay ocho juntas distintas, una por provincia. O será porque en la ciudad de Granada gobierna el PP y en San Roque lo hace el PSOE”.
De hecho, en los escritos enviados a los distintos responsables autonómicos, el regidor sanroqueño considera que “convendría que desde la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía se aclare cuanto antes a este Ayuntamiento, y al conjunto de la sociedad, si existe un mismo criterio por parte del Gobierno de la Junta para las ocho provincias de nuestra comunidad, o si por el contrario las directrices son distintas en función de territorios o de cualquier otra cuestión relacionada con la filiación política de quienes dirigen las administraciones locales”.
Además, refleja “el profundo malestar de este Ayuntamiento y del más de un centenar de personas voluntarias de San Roque que a lo largo del último mes han venido colaborando de manera desinteresada y altruista para la confección de unas mascarillas que, a diferencia del criterio usado en Granada, fueron rechazadas y descartadas por la Junta de Andalucía”.
Recuerda el alcalde en dichas cartas que, el pasado 18 de marzo, el Ayuntamiento hizo a la Junta un ofrecimiento oficial para realizar estas mascarillas ante la urgente necesidad de material de protección para combatir la pandemia. Paralelamente, buscó el asesoramiento de personal del SAS en el Hospital de la Línea, que recomendó su confección con prolipropileno, material que ha adquirido el Consistorio con fondos propios, y también señaló las características y requisitos técnicos para su elaboración, unas pautas que se han seguido por las personas voluntarias sanroqueñas de manera estricta.
La primera remesa de 1.000 mascarillas se entregó al citado hospital el 23 de marzo, pero el alcalde recibió una llamada telefónica de la delegada Territorial de Salud “rechazando esa donación y argumentando que se trataba de mascarillas no homologadas y que no eran necesarias en el Servicio Andaluz de Salud”. Más tarde, el 1 de abril, la delegada de la Junta en Cádiz envió por escrito al Ayuntamiento el rechazo formal a las mascarillas, esgrimiendo las mismas razones que la delegada de Salud. Finalmente, el 7 de abril llegó un escrito de la subdelegada en la comarca en el que se señalaba lo siguiente: “Con objeto de generar tranquilidad en esta crisis sanitaria, le pido responsabilidad…Pienso que en estos tiempos difíciles, alcalde, no debemos generar más alarma en la opinión pública, sino cooperar en los trabajos que se están realizando para parar el virus”.
Tras reiterar que desde el Ayuntamiento sólo se ha querido cooperar con la Junta poniéndole a disposición mascarillas elaboradas con material sufragado por el Consistorio y realizadas siguiendo los criterios de técnicos del SAS, el alcalde reclama “una explicación verosímil de por qué unas mascarillas hechas por voluntarias de nuestro municipio son rechazadas por el SAS y, sin embargo, sí son admitidas en Granada”.