Ha fallecido en Madrid y después de unos cuatro meses con problemas en los riñones, pérdida de sangre y problemas de los que era tratado en la sucursal que la Clínica de Navarra tiene en Madrid (junto a Ifema) y con una larga y penosa agonía en la que llevaba días sedado y a los 88 años de edad, el cura Luis de Lezama Barañano.
La Capilla Ardiente se instalará en la parroquia de la Virgen Blanca, en Monte Carmelo, Madrid y estará abierta al público desde las 10 de la mañana.
A las 7 de la tarde se celebrará el funeral por el eterno descanso de Luis Lezama, al que ya han anunciado asistirán grandes personalidades de la vida nacional y muchos representantes de la Hostelería y el Turismo de España.
Posteriomente será incinerado ya que había manifestado su deseo de que una parte de sus cenizas estuviesen junto a la de sus padres y familiares en el País Vasco y otra parte permanecerá en la parroquia de la Virgen Blanca que él creó donde se pondrá una placa en su recuerdo.
Luis de Lezama dejó muy bien estructurado en los últimos tiempos, el Grupo Lezama y el Grupo Alabardero, con la Escuela de Hostelería que el fundó, que se rigen por un Consejo de Administración donde están de patronos, los primeros dirigentes de hostelería que él mismo preparó como chefs y maitres, entre ellos Juan Marcos.
Recientemente nombró como presidente ejecutivo del grupo al joven Jon Urrutia (con el que aparece junto al Papa recibiendo un caramelo) y que es sobrino suyo, mientras que Juan Carlos Cantero, residente en Marbella ocupa el cargo de director general. En todos los cargos orgánicos del Grupo figuran jóvenes muy bien preparados y con gran profesionalidad
Lezama se distinguió en su vida por ser “fabricante de empresarios y profesionales del Turismo”, ya que como fundador de la Escuela de Hostelería del Alabardero ha formado en esta profesión a treinta mil profesionales, muchos de ellos ya con su propio restaurante, mesón u hotel y ha dado trabajo y da trabajo en su cadena de Restaurantes El Alabardero en Whashington y Seatle en Estados Unidos, Madrid, Sevilla, País Vasco y Marbella a muchos cientos de trabajadores.
Su catering El Alabardero sirve las fiestas y banquetes mas importantes de Madrid, de Sevilla y de Málaga y la Costa del Sol.
Su trabajo sacerdotal comenzó como párroco de Chinchón en el cinturón de Madrid cuando en Entrevías y el Puente de Vallecas ejercían su apostolado los famosos “curas obreros” que seguían las directrices de las encíclicas papales “Rerun Novaruum” y “Cuadrigessimo anno”.
Lezama comenzó a formar y a preparar empresarios y profesionales de Hostelería que crearan trabajo y riqueza.
Luis de Lezama tuvo como lema: “no le des un pez, enséñale a pescar y tendrá muchos”.
De formación periodista en la Escuela de Periodismo de la Iglesia que fundara el cardenal Herrera Oria, Luis de Lezama tuvo un papel muy importante en la fundación de la cadena Cope.
El cardenal Rouco Varela lo nombró párroco de Santa María la Blanca en Madrid donde ha hecho una gran labor fundando un colegio bilingüe que sigue las pautas de la enseñanza británica.
En Marbella con el apoyo del presidente del Real Madrid, Ramón Mendoza abrió en un local que le cedió, La Taberna del Alabardero, uno de los Restaurantes que dio prestigio a Puerto Banús en los tiempos en que estaba el Club 31 (Jockey) de : La Taberna del Alabardero, en la esquina antes de llegar a la Torre de Control por donde estaba el famoso “Beni”, que luego trasladó a una finca en la carretera de Ronda donde funcionó el Resort El Alabardero; tambien en el 1977 abrió con los Parladé «La Venta El Cus Cus» y junto al equipo de chicos que estaba formando abrió un chiringuito junto a la casa de Antonio El Bailarín en las Playas de El Rodeo que coincidió en un verano de lluvias y mal tiempo que hizo fracasar el empeño.
Finamente en el Paseo Marítimo de San Pedro Alcántara, abrió el Alabardero Beach que se ha convertido con sus instalaciones, frente al mar y su cocina, especializada en arroces y paellas, en uno de los sitios de prestigio en Marbella.
El pasado verano fue nombrado académico de honor de la Academia Gastronómica de Marbella en un brillante acto que se desarrolló en el Alabardero Beach donde luce el pergamino otorgado con este motivo.
En Marbella gozaba de muchos amigos y admiradores de su trabajo y Cope Marbella lo distinguió en una de sus famosas galas de la Navidad que organiza con tanto éxito su director José Antonio Gómez Gutiérrez, nombrándolo Pregonero de la Navidad otorgándole en nombre de la ciudad de Marbella una distinción que le entregó el entonces párroco y arcipreste de la Costa del Sol, hoy canónigo de la SI Catedral, Don José López Solórzano.
Gustaba de pasar los veranos en la Costa del Sol y acudía a oficiar la Santa Misa a la iglesia de San Luis de Sabinillas con el párroco de Manilva-Casares-Sabinillas, José Antonio Melgar Muriana. También era habitual de la parroquia de El Rocio, de San Pedro Alcántara donde durante los muchos años que vivió en San Pedro acudía a oficiar la Santa Misa y bautizar a muchos de los hijos de su equipo de profesionales de hostelería y de vecinos de San Pedro donde era muy querido y apreciado.
La noticia de su fallecimiento ha corrido de inmediato por Marbella y el presidente y el secretario de la Academia Gastronómica de Marbella, el doctor Andrés Manuel Sánchez Cantos y el abogado Ricardo S Bocanegra se han apresurado a darla a conocer y enviar su pésame a su secretario personal, Juan Carlos Antón y al director general de El Albardero, Juan Carlos Cantero Muela, al consejero asesor, Joaquín Martínez, así como a alguno de sus antiguos alumnos y colaboradores como el chef residente en San Pedro, Juan Marcos.
En las fotos de CACHO y del Archivo,
.Al conocerse la triste noticia del fallecimiento son muchas la muestras de pesar que llegan a “La Tribuna Hoy”, Andalucía.
Entre ellas resaltamos la del crítico gastronómico Peoe Oneto que desde San Fernabdo escribe:
Lamento profundamente el fallecimiento de Luis Lezama, un hombre cuya vida estuvo marcada por su incansable labor en favor de los más desfavorecidos y su contribución invaluable al ámbito de la gastronomía y la hostelería de Andalucía y de toda España. Su dedicación a conservar, divulgar y elevar nuestra rica tradición culinaria ha dejado una huella perdurable. Como amante y defensor de la gastronomía, valoro enormemente su legado y me duele su partida. Mi más sincero pésame a su familia y seres queridos.
Por su parte la Fundación a través de la Escuela de Hostelería de Andalucíí en un comunicado dice:
Lamentamos comunicar con profunda tristeza el fallecimiento de don Luis De Lezama Barañano, fundador de la Fundación Iruaritz Lezama, Grupo Lezama y Santa María la Blanca. Don Luis no solo fue un líder visionario, sino también un guía espiritual, un creador de oportunidades y un incansable constructor de sueños a través de los numerosos proyectos que lideró. Su compromiso con los valores humanos, su fe y su empeño por mejorar la vida de tantas personas se reflejan en el trabajo desarrollado por la Fundación, el Grupo Lezama y Santa María la Blanca. Fieles a los valores que siempre defendió: el servicio, la humanidad y la excelencia. Su partida deja un gran vacío, pero también un inmenso legado de vida y trabajo. El Velatorio y Capilla ardiente se instalará y tendrá lugar el lunes, día 13 de enero a partir de las 10h en el Atrio de la Parroquia Santa María la Blanca de Montecarmelo de Madrid (calle Monasterio de Oseira, 25). La Eucaristía Funeral se celebrará el mismo lunes a las 19:30h en el Templo principal de la Parroquia Santa María la Blanca de Montecarmelo. Os invito a acompañarnos, en cuerpo o en espíritu y a rendir homenaje a quien hizo posible todo lo que somos como organización y como familia. En este momento de profunda tristeza, desde la Fundación reafirman el compromiso de seguir adelante, unidos y comprometidos con la visión que don Luis dejó. |