Lamentablemente, la buena marcha del sector turístico en Andalucía en todas sus cifras: beneficios, pernoctaciones, visitantes, sigue sin impactar en la estacionalidad de los establecimientos hoteleros de nuestra comunidad. Así, la estacionalidad para la temporada baja 2016-2017 va a ser similar a la registrada en el mismo periodo de 2015-2016. Todos los hoteles, que cerraron en el invierno del año pasado, han vuelto a cerrar. En total 150 establecimientos permanecieron cerrados en la temporada baja, privando al turismo de 64.964 plazas hoteleras
Las cinco provincias andaluzas más afectadas por la estacionalidad han sido, por este orden: Cádiz, que ha cerrado 38 hoteles, o lo que es lo mismo 13.857 camas; Málaga, 64 hoteles, con un total de 26.000 camas; Almería ha cerrado 25 hoteles (11.702 camas); Huelva, 19 establecimientos hoteleros, con un total de 11.555 camas y, por último, Granada que ha cerrado4 hoteles (1.850 camas). En total, en nuestra comunidad se han cerrado 150 establecimientos en la temporada baja, lo que equivale a 64.964 plazas menos (el 39% de las plazas hoteleras andaluzas ubicadas en litoralandaluz). Como único dato positivo debemos reseñar que, al menos, en las provincias de Málaga y Cádiz y en la costa de Granada, los hoteles han cerrado más tarde debido a la excelente temporada turística y el buen clima de este invierno.
Muchos de estos cierres se justifican en reformas, sin que, efectivamente, tales se lleven a cabo. En muchos casos los establecimientos hoteleros reabren sus instalaciones sin haber dado ‘ni una mano de pintura’, hecho que merma calidad y competitividad a los mismos porque cada día el turismo es más exigente y busca mejores instalaciones. Invertir en mejorar la calidad de los hoteles, sobre todo cuando los precios han subido un 11,86% en Andalucía, es invertir en sostenibilidad y en satisfacción del cliente.
La estacionalidad, a juicio de CCOO, es un gran problema que, aunque no es nuevo, sigue haciendo mucho daño a la imagen turística de nuestra comunidad, al empleo, directo e indirecto, a otras empresas que se benefician del turismo y a la propia competitividad del sector ya que cuando se cierra un establecimiento hotelero arrastra al conjunto de oferta de servicios de la localidad. En definitiva, cuando se cierra un hotel se cierra un «trozo de la ciudad.»
Ante este panorama, para CCOO la tarea prioritaria de todas las partes implicadas, administraciones, agentes sociales y económicos, es la de aplicar el Plan de choque contra la estacionalidad turística en el litoral andaluz que tenía como objetivo aminorar las estacionalidad en un 5%, así como poner en marcha la red de Municipios Turísticos de Andalucía. Esperamos que, una vez constituida la Federación de Municipios de Andalucía, todos los partidos políticos andaluces, sin excepción, y los ayuntamientos de la Red de Municipios contra la Estacionalidad Turística se adhieran para evitar los perjuicios de la estacionalidad en zonas costeras, perjuicios que van desde una menor generación de renta a la desaparición de empleo, pasando por el desaprovechamiento de importantes oportunidades de negocio derivadas de la atracción de flujos turísticos en temporada baja.
Igualmente, CCOO insta a primar a los empresarios que mantengan abiertos sus establecimientos los 12 meses del año con incentivos tales como rebajas de impuestos, prioridad para acceder a los fondos reembolsables, etc. Consideramos justo favorecer a quien apuesta contra la estacionalidad.
Por otra parte estamos convencidos que las provincias del litoral andaluz más afectadas por la estacionalidad turística tienen potencial turístico suficiente para aminorar la estacionalidad, ya que contamos con una oferta hotelera diversificada y una excelente relación precio-calidad-servicio, además de disfrutar de un excelente clima. Por ello, debemos potenciar los segmentos de turismo social, de salud, de deportes, a nivel general, y, en particular, el de golf, cultural, etc. para conseguir que los establecimientos hoteleros se mantengan abiertos los 12 meses del año.