Los Ministerios del Amor, de la Paz, de la Abundancia y de la Verdad son ministerios en la novela distópica y futurista de George Orwell, 1984, ambientada en Oceanía. A pesar del nombre, no se mencionan «ministros» en el libro, y toda la atención pública se centra en el testaferro idealista, el Big Brother (Gran Hermano).
El Ministerio de la Paz se ocupa de la guerra, el Ministerio de la Verdad de las mentiras, el Ministerio de Amor con la tortura y el Ministerio de Abundancia con la inanición. Estas contradicciones no son accidentales, ni resultan de la hipocresía ordinaria: son ejercicios deliberados del doble pensamiento.
El nombre de Ministerio de la Verdad es un término equivocado, porque en realidad sirve para lo contrario : es responsable de cualquier falsificación necesaria de los acontecimientos históricos. De acuerdo con el concepto de doble pensamiento el ministerio recibe el nombre correcto, porque crea / fabrica la «verdad» tal y como la neolengua las define y entiende. El libro describe el falseamiento de los registros históricos para mostrar una versión aprobada por el gobierno de los acontecimientos.
El Ministerio de la Verdad está involucrado con los medios de comunicación, el entretenimiento, las bellas artes y los libros educativos. Su propósito es volver a escribir la historia para cambiar los hechos, y así adaptarse a la doctrina del Partido de la propaganda efecto. Por ejemplo, si el Gran Hermano hace una predicción que resulta ser incorrecta, los empleados del Ministerio de la Verdad deben corregir el registro para que sea precisa.
El Ministerio juega su papel que es el de cambiar la historia, y el cambio de las palabras en los artículos sobre la actualidad y el pasado, por lo que el Gran Hermano y su gobierno siempre son buenos y nunca pueden hacer ningún mal. El contenido es más propaganda que las noticias reales.
La pregunta número seis de la última encuesta del CIS es la demostración de todo esto: «¿Cree usted que en estos momentos habría que prohibir la difusión de bulos e informaciones engañosas y poco fundamentadas por las redes y los medios de comunicación sociales, remitiendo toda la información sobre la pandemia a fuentes oficiales, o cree que hay que mantener libertad total para la difusión de noticias e informaciones?».
En eso estamos. El digital ELDIARIO.ES que no es sospechoso de nada, hace un artículo titulado: ECHA EL FRENO, MARLASKA.
Algeciras, 22 de abril de 2020
Patricio González