Un matrimonio amigo nuestro de María y mío, Pedro y Raquel, que viven en Badalona, en una conversación telefónica me decían, Mira Juan Antonio, estamos hartos, indignados y rebelados. Tenían como otras muchas gentes con las que he tenido ocasión de hablar, la sensación de que les estaban tomando el pelo.
En los tiempos que vivimos, estamos asistiendo a la política espectáculo, de cuantos más gritos y escándalos mejor que mejor. Si antes había programas que dedicaban cinco horas a la señora Pantoja o a doña Belén Esteban, ahora entre vuelos y revuelos, infoxicaciones y mensajes en twuiter vemos como hay sujetos que gobiernan el mundo, nuestro país o Cataluña.
Cuando en este país los cortes de mangas, los carteles y los escraches son el discurso de quienes se dicen defensores de la libertad, los insultos, las descalificaciones y el griterío se imponen a la palabra y a los argumentos. Mal, muy mal va la cosa.
No es de recibo que haya personajes que en lugar de buscar soluciones a los problemas de los ciudadanos y ciudadanas que dicen representar, se dediquen a fabular tramas y relatos, se inventen realidades virtuales en lugar de respetar la legalidad.
Escribo estas letras cuando no se habla de otra cosa, en la calle o en las tertulias de radio y televisión, que de la aplicación del 155, puesto en marcha por el gobierno del señor Rajoy del PP, con el apoyo del PSOE y CIUDADANOS.
Hasta última hora antes que terminara el viernes el señor Puigdemont iba a parar su aplicación con su comparecencia en el Senado o el anuncio de una convocatoria electoral, o bien en un triple salto mortal sin red, se iba a hacer el harakiri e iba certificar su suicidio político en una huida hacia adelante intentado proclamar en el Parlament, la Republica de Cataluña.
La mayoría de la población esperaba que la gente se sentara a dialogar desde el respeto a la legalidad, pero ha habido más intención de cerrazón que de apertura, más deseo de imposición que voluntad de dialogar, más estrategia de poner en crisis al Estado que de beneficiar a la ciudadanía.
Don Carles es uno de esos iluminados, a los que no se le puede aplicar la lógica convencional y la racionalidad, con el que nunca se sabe por dónde va a salir, y en su bipolaridad política, hubiera sido deseable que tuviera un rasgo de sensatez y hubiera vuelto a la senda de la cordura y la legalidad, y no continúe actuando como el salvador y mártir de la causa independentista.
El pasado jueves día 26, fue todo un ejercicio de metamorfosis kafkiana entre dudas e incertidumbres y acusaciones de traidor, el señor Puigdemont pasó de la Declaración Unilateral de Independencia (DUI) a la posible Convocatoria de Elecciones autonómicas anticipadas.
De una comparecencia a las 13,30 que no se produjo , a las 14,30 en que fue suspendida para aparecer finalmente a las 17,00 horas y no decir nada, salvo que no tenía garantías para celebrar nuevas elecciones mientras le dimitían dos integrantes de su grupo y un Conseller ; Santi Vila , responsable de Empresa.
Entre lo hago y no lo hago, dio usted un espectáculo político lamentable, y como protagonista de una ópera bufa asistimos que los vaivenes terminaron con lo que más temíamos y que era su intención desde el primer momento ha intentado usted burlarse de todos los catalanes y españoles, incluso de aquellos que comparten sus tesis. En el inicio de la tarde del mismo Viernes día 27, el Parlament de Catalunya, con la ausencia de CIUDADADANOS, EL PSC Y EL PP aprobó la declaración de independencia bajo la forma de una República, por 70 votos a favor, 10 en contra y 2 abstenciones. Qué día más triste que 70 personas en secreto y sin dar la cara, decidan el destino de 7,5 millones ciudadanos y ciudadanas.
Apenas media hora más tarde, el Senado de España votó la aplicación del 155 por 214 votos a favor, 47 en contra y una abstención y dos horas después el Consejo de Ministros se reunió para poner en práctica las medidas concretas para iniciar el restablecimiento de la legalidad.
Y tras la reunión El Presidente del Gobierno anunció el cese de Puigdemont y todo el Govern, así como disolver el Parlament y convocar elecciones en Cataluña para el próximo 21 de Diciembre, lo que supone querer recuperar la legalidad y normalidad democrática en el plazo más breve.
Las instituciones de este país europeo, llamado España, solo han hecho cumplir con sus obligaciones, de ahí que el gobierno haya puesto en marcha el artículo 155 de la Constitución Española, Se le puede acusar de todo, menos de precipitación, podía haberlo hecho antes pero se ha agotado la paciencia y ha cubierto todo el cupo de oportunidades para que usted, señor Puigdemont, pudiera adoptar la mejor de las posiciones en favor de la ciudadanía
Nos parece muy bien, que el PSOE y CIUDADANOS, aunque disten mucho, por diferentes razones del PP, hayan tenido sentido de Estado y hayan apoyado al igual que el conjunto de la Unión Europea, las medidas adoptadas. Por eso no nos debe extrañar que a partir del viernes 28, en que la ha ratificado el Senado, y tras el Consejo de Ministros y su publicación en el BOE; comiencen a ser efectivas.
Y solo, el señor Puigdemont podía impedirlo, solo él y los independentistas podían hacerlo, y tenían tres caminos volver a la legalidad y decir que no tenían intención de proclamar la independencia o aceptando la Constitución Española y el Estatut, convocar nuevas Elecciones al Parlamento de Cataluña, pero optaron por la tercera y la peor de las opciones, declararse en rebelión frente al Estado y la legalidad con la proclamación de la Independencia y la Republica Catalana.
Tenemos el 155 en marcha, y hemos de reflexionar que las medidas más duras y necesarias, deben ser compatibles con el ejercicio de los derechos democráticos, desde el realismo y en la conciencia que no hay soluciones mágicas.
Señor Puigdemont, podía haber ido usted al Senado el jueves día 26 a las cinco de la tarde, como le habían ofrecido y aunque no sea usted aficionado a los toros, haber hecho la faena de su vida y dejarse de gaitas y milongas. Haber vuelto a la legalidad, parar la aplicación del 155 y dialogar. Incluso podía haber acudido usted a la Cámara Baja el viernes por la mañana, pero usted erre que erre, manteniendo a la ciudadanía entre la angustia y la indignación ha tomado el camino de la ruina.
Debería usted saber, que ningún demócrata de este país desea que se ponga en marcha el 155, pero ustedes en lugar de borrar fronteras como aspira la humanidad en este siglo XXI se han dedicado a levantarlas. En vez de utilizar la política para abrir puertas se han empeñado en cerrarlas.
Han fabricado ustedes relatos y mentiras, gritando ¡prensa española manipuladora! , cuando lamentablemente han sido ustedes quienes se han dedicado a querer aplicar leyes aprobadas ignorando a más de la mitad de la cámara autonómica, y vulnerando los derechos de los diputados de la oposición, haciendo caso omiso de los requerimientos del Gobierno de España y situándose descarada y provocadoramente fuera de la ley.
Hasta ahora quien le ha marcado la estrategia política, en el colmo de las esquizofrenias políticas ha sido un partido antisistema, la CUP y dos Asociaciones que no se han presentado a las elecciones , Omnium Cultural y Asamblea Nacional Catalana, cuya principal finalidad es desobedecer al Estado a toda costa. Curiosamente el discurso de los independentistas ha sido culpar a los demás de sus propios pecados.
Incluso el vicepresidente Oriol Junqueras elaboró un documento a modo de argumentario para demostrarnos lo beneficioso que resultaría la independencia y lo mal que ha estado ahora dentro de España, lleno de mentiras, falsedades, inexactitudes y tergiversaciones.
Nadie, salvo ustedes han hecho más cosas en contra del autogobierno de Cataluña. Con su discurso nacional populista se han quedado solos, y creo que éste no es más que el principio de ir hacia atrás, no ya por las salidas de empresas de las que nadie de bien puede desear y querer, ni por la bajada en el turismo, ni tan siquiera por el gravísimo perjuicio económico que están causando a Cataluña, España y Europa.
Es posible que si no rectifican, la próxima semana el Presidente y los miembros del Govern, estén en su casa haciendo crucigramas independentistas o tal vez recluidos a donde los mande la justicia, que el Parlamento tenga seriamente limitadas sus funciones, que estén intervenidos económicamente de forma total, que se cierren esas embajadas políticas en el extranjero, que la Jefatura de los mossos d, Escuadra esté en manos de Interior y que los medios de comunicación públicos como TV3, que eran sus órganos de propaganda, estén intervenidos o se opte por una aplicación gradual del articulo 155 tal y como propuso el PSOE y aprobó la Comisión del Senado.
También podemos situarnos en el punto más alto del Club de la Comedia, del Circo del Sol o del musical Y no es verdad, en el que ustedes no explican que no representan a toda la población catalana y que solo uno de cada tres catalanes, según las últimas encuestas quieren que esto termine en independencia.
La épica de la falsedad y el ultranacionalismo de la salvación son la antipolítica y esa no es la solución para nadie, y ya son alrededor de 1800, entre las cuales se encuentra una de una prima de Puigdemont, las empresas que se han marchado. Recuerdan cuando ustedes prometían que no solo todos se quedarían sino que vendrían más, porque ustedes construirían un nuevo paraíso, y tendrían soluciones y remedios para todos los males y problemas, como los cuentos de Yupi.
A usted , señor Puigdemont, se le ofreció la posibilidad de explicar sus ideas y planes ante el Senado, el jueves por la tarde o el viernes por la mañana o bien pasar de todo y darse un baño de popularidad secesionista el viernes en el Parlament para en un acto de despropósito declarar unilateralmente la independencia y la Republica de Cataluña, entre la inmolación o la digna salvación de volver a cumplir la legalidad y no terminar de arruinar el presente y el futuro de su tierra, usted optó como siempre por la peor de las soluciones
Se habrá dado usted cuenta que Bruselas en todo momento ha bendecido la aplicación del artículo 155 de la Constitución Española y que Juncker, Presidente de la Comisión Europea ha dicho en numerosas ocasiones que está en contra de todos los separatismos en Europa
Quede claro, porque así lo demuestra la realidad que son ustedes los promotores de todas ilegalidades y que deberían pedir públicamente perdón a la ciudadanía española y catalana. Si no lo hacen pensaremos que ustedes son un peligro para la sociedad que dicen representar, y que lo único que les ha interesado y les interesa es alimentar el espectáculo a ver si estimulaban algún apoyo internacional que hasta ahora no se ha producido.
Además según le advirtió el Fiscal General del Estado José Manuel Maza, si se echaba usted al monte con la Declaración Unilateral de Independencia sería detenido, y tal y como ha ocurrido, esto no ha acabado bien, y ha tenido un feo final en Soto del Real haciéndole compañía a tanto ilustre venido a menos de la política catalana y española.
Pero con todo y con eso , el 155 no puede ser un instrumento para acabar con el autogobierno de Cataluña , sino todo lo contrario para recuperar la normalidad, evitar las tremendas consecuencias económicas y sociales, recuperar la autonomía y la vigencia del Estatuto y convocar elecciones en el plazo más breve posible. A partir de ahora ese tiene que ser el trabajo de las fuerzas políticas constitucionalistas.
Cuando el pueblo de Cataluña sea llamado legalmente a las urnas, todos masivamente han de acudir para dejar claro que una minoría no puede decir el destino de todo un pueblo, que se ha caracterizado siempre por ser un ejemplo de convivencia.
Juan Antonio Palacios Escobar