¡Italia! ¡La cantidad de titulares que está dando esta jornada, y los que quedan aún!. Y es que no hay nada más radical que los conversos a una fe o a un dogma, ¡lo he dicho siempre!
El siglo XX bien le dio fundamentos a un tango: “Cambalache”, y bien que dejó sentenciado un futuro que inexorablemente se va cumpliendo a pesar de que por aquí o por allá se parcheen, en la escasa medida de lo posible, las grietas que cada vez surgen con más fuerza en la sociedad contemporánea. A casi un siglo vista la memoria, la memoria histórica de verdad se ha perdido hasta el punto de que olvidar se olvida, o así se pretende, lo que conviene. Y es cierto que hacer memoria no trae a veces cuenta y provoca dolores de cabeza.
Ahora, imperando eso de los estados sociales democráticos y de derecho que tan bien parece que suena y que tan poco contenido tienen a la hora de la verdad, uno se percata de ciertas cosas que demuestran el fraude histórico permanente y el modo en el que la opinión y el pensamiento colectivo han resultado viciados a través de los años. Así digamos que desde hace setenta años para atrás la historia, los acontecimientos vividos, los comportamientos colectivos no cuentan, no existen.
Y hoy, cuando leo los titulares según los cuales ha pasado algo nuevo, terrible, demoledoramente destructivo y es que la mayoría de los votantes italianos o se han equivocado o han ido poco menos que amenazados para votar a lo que llaman la extrema derecha, titulares que demuestran a mi humilde modo de ver que en la democracia y en sus reglas de oro, sus dogmas y demás monsergas no cree ni el que la inventó, me he ido de paseo por el pasado a ver que había por el mundo hasta la invasión de Europa por parte de los Estados Unidos de América.
Y así me he ido, por ejemplo a Polonia, y recuerdo al Reino Independiente de Polonia, a su Segunda República y a la dictadura del Mariscal Josef Pilsudski, que duró desde 1.918 hasta la anexión por el bloque soviético. Y claro que nadie sabe que, por ejemplo, esa Polonia liquidó en 1.919 a la República Popular Ucraniana Occidental para anexionarse territorios, y ahora parece que le va la vida en la defensa de una democracia a la que ha llegado sin ningún fundamento histórico ni sentimiento nacional, por conversión impuesta por un interés económico en salir del estado de miseria que le había impuesto el comunismo y siguiendo los dictados de una Alemania que le puso la bota al cuello en 1.939. Y me he dado un paseo por Hungría, que es más coherente con su historia puesto que desde la desmembración del Imperio Austrohúngaro y su constitución como Reino, bajo la regencia permanente y perpetua del célebre Horthy desde 1.920 hasta la invasión soviética, y tampoco en tiempos anteriores, ni supo no conoció de democracia, siendo otro país converso pero que parece que tiene micho más claro que es lo que tiene que defender por encima de todo. Y me he ido a Bulgaria… ¿nadie recuerda la dictadura real de Boris II desde 1.918 hasta la caída en el comunismo? ¿Qué sentimiento democrático puede haber arraigado?. ¿Y la “Gran Rumania” de 1.920? Con Fernando I no hubo democracia, con Carlos II hubo una permanente inestabilidad entre los gobiernos dictatoriales del Rey y el surgimiento del partido fascista de la Guardia de Hierro, y así llegó aquel país hasta su sometimiento al bolcheviquismo… Después, tras la caída del comunismo, surgió como por arte de magia el sentimiento democrático…. Y así un largo etcétera al que no podemos de dejar de recordar a Portugal y a España.
Y me imagino que habrá quien diga que miento, que este hereje del sistema se saca de la manga los hechos… ¡Pues busquen y comparen datos antes de que se borren del todo de los registros de la verdadera historia!
¡Cuánta falta de rigor!. Hasta en los resultados electorales de cualquier país se engaña vilmente al no contar con el hecho de la creciente abstención y su real interpretación, que no puede ser otra que la de que cada vez aumenta en las sociedades occidentales el hastío, el aburrimiento, el asco, y por eso cada convocatoria electoral no es ninguna fiesta, como se dice en esta boba España, por ejemplo, sino un calvario, un tormento y un motivo para protestar desvinculándose. Pero la falta de rigor y la acción desmemorializadora da buenos frutos, incluso permite, con la ayuda del dinero, hacer olvidar datos que deberían ser terribles y dar más o menos por cierto de total fe que, por ejemplo, no hubo alemanes nazis entre la ciudadanía, que eso es falso, a pesar de que en las elecciones de noviembre de 1.932 votó el 80,58% del cuerpo electoral, y de los votantes, el 33,10% se decantó por el trágico partido de Hitler.
¡Todo es igual, siempre es igual!, como dice el tango “Siglo XX, cambalache problemático y febril…”, un siglo pasado que ha dado el testigo a otro aún peor, más contradictorio, vacío y envenenado, con el mismo juego pueril de malos y buenos y sin ningún espíritu de enmienda, en el que se hacen sonar las alarmas cuando alguien, sea un individuo, sea una colectividad, cambia el paso.
Si, Italia ha cambiado el paso, pero Suecia también, en Francia no andan muy contentos, de los austríacos se dice que son poco previsibles, dudosos, en Grecia no se sabe que va a pasar y si acabarán a bofetadas con los turcos como es tradicional, esa Grecia democrática también desde anteayer… Los ingleses, hoy de luto, se fueron de la Unión Europea y a pesar de lo que insistentemente se nos cuenta, siguen vivos y no se han caído por un barranco. Por otra parte la Unión Europea promete dinero, da y reparte, o así lo aparenta, pero nadie que tenga aún dos dedos de sentido común puede dudar que el dinero lo va a tener que pintar porque no hay, no abunda… De España ni escribo porque me marea, me aburre y me produce ardentías la cotidiana sucesión de hechos sin sentidos, mentiras y dramáticas estupideces que trascienden.
¡Y ahora Italia, la ocurrencia de los italianos de expresar su voluntad en las urnas! Una voluntad que ha salido rana para los intereses de esas sociedades de demócratas conversos en las cuales podría ser que por mano del diablo cunda el ejemplo y las gentes se vuelvan respondonas.
El romano de la época de los espadazos, las legiones y la formación de un Imperio, que es lo que hace falta ahora, diría aquello que ya hace tiempo que muchos, cada vez más, proclaman: Delenda est la Unión Europea!, y si el romano, además, fuese de la Hispania, haría tambien esta pregunta: Quo vadis España?
Manuel Alba
Una salva de 21 cañonazos ha saludado la llegada al Trono de Su Majestad el Rey Carlos III, retumbando como en todo el Reino Unido, también desde Gibraltar.
El gobernador, jefe de las Fuerzas Armadas Británicas en la Base de Gibraltar y representante de SM en la Roca, vicealmirante Sir David Steel junto con el ministro principal del Gobierno de SM en Gibraltar, Fabián Picardo, han presidido la ceremonia militar llevada a cabo por la sección de Artillería del Real Regimiento de Gibraltar con el nuevo Teniente Coronel en jefe del Real Regimiento de Gibraltar, al mando.
Esta unidad ya disparó, días anteriores los 96 cañonazos en recuerdo a los años que vivió la Reina Isabel II qepd y es la única unidad militar del Reino Unido que ha llevado a cabo los disparos de cañón fuera de las Islas Británicas.
El acto de proclasmación del Rey Carlos III tendrá lugar este domingo 11 de septiembre a las 11 de la mañana con un desfile militar a cargo de las unidades militares presentes en la Base Británica de Gibraltar y con el Real Regimiento de Gibraltar rindiendo honores al desflar ante el Palacio del Gobernador, en cuya balconada se situará el vicealmirante Sir Davir Steell, el primer ministro Fabián Picardo y autoridades. El desfile seguirá por la calle Real de Gibraltar.
Desde el balcón del palacio de The Convent, el gobernador dará lectura al acta de proclamación de Su Majestad Carlos III y las banderas de las unidades militares rendirán ante el himno Nacional. God Save The King!!.
Las banderas a media asta volvieron a alzarse, para saludar al nuevo Rey, aunque luego bajaron a media asta para estar así durante los días que dure el duelo nacional.
Estas ceremonias estan teniendo lugar tenido lugar coincidiendo con el Dia Nacional de Gibraltar, el 10 de septiembre, para cuya celebración habían llegado días antes y como cada año, una serie de MP, parlamentarios de diferentes partidos presentes en el Parlamento Británico para arropar al pueblo gibraltareño en su Día Nacional. Estos parlamentarios tuvieron una reunión previa con el vice primer ministro de Gibraltar, Joseph García, quien les informó de la situación en este territorio británico de Ultramar, dando cuenta del éxito de los trabajos llevados a cabo dias pasados para evitar una catástrofe medioambiental, tras el choque de dos barcos en aguas de Gibraltar, contando con una excelente colaboración de las autoridades vecinas de España, hecho inédito que podría marcar una nuera era de relaciones entre los dos territorios vecinos.
El viceministro también informó entre otras cuestiones sobre la actual situación de Gibraltar, los problemas acaecidos con el suministro de agua potable a la población tras el incendio (todavía no esclarecido) en un túnel que afectó a las depuradoras y como el Gobierno pudo solucionarlos, informando también, entre otras cuestiones de cómo se están desarrollando las conversaciones post Brexit entre la Unión Europea, con el Reino de España, el Reino Unido y Gibraltar, así como las reuniones mantenidas estos días en Londres con los nuevos miembros del Gabinete de Liz Truss.
Algunos de estos parlamentarios tuvieron oportunidad de firmar en el Libro de Condolencias instalado en el Palacio del Gobernador y ante el que han estampado su firma miles de gibraltareños a veces guardando horas de cola.
Mensaje de Fabián Picardo
Con motivo del duelo nacional, el primer ministro de Gibraltar, Fabián Picardo ha emitido un mensaje televisado en el que ha dicho:
“Mis queridos compatriotas gibraltareños y residentes en Gibraltar:
La muerte de la Reina Isabel II ha sido un golpe terrible para todo el pueblo británico y para los pueblos de todos sus reinos y de la Commonwealth y para otros muchos lugares y territorios del mundo, a la vista del gran número de condolencias que nos llegan.
Todo Gibraltar está hoy bajo un manto de dolor. Estamos unidos en el luto. Todo el pueblo británico y la familia de naciones británicas están de luto por la pérdida de nuestra Reina y el fin de la segunda era isabelina.
Durante los próximos diez días, y más tiempo, estaremos de luto por el fallecimiento de nuestra querida soberana, la Reina de Gibraltar. Una posición que Isabel II ocupaba no sólo en nuestros corazones, sino también en nuestras leyes.
Y Gibraltar, ha sido, la única Batería de Artillería en disparar sus cañones, fuera del Reino Unido, bien do y oyendo como el Regimiento Real de Gibraltar llevaba a cabo una salva fúnebre en la base naval de SM cdon toda brillantez protocolaria.
Se han disparado 96 cañonazos. Uno por cada año de la larga vida de la Reina Isabel.
Nuestro querido y respetado Real Regimiento de Gibraltar custodió en sus palacios a nuestra soberana a principios de este año.
Hoy nos hemos sentido orgullosos de ellos bajo el mando del comandante gibraltareño Charles Bonfante.
Y este sábado también a la 1 de la tarde, el Regimiento realizará una salva de 21 cañonazos en honor a la Proclamación en Londres del nuevo Rey, Carlos III, Rey de Gibraltar.
Al reflexionar con ustedes sobre la intensidad de nuestro luto, me hago eco de las palabras de ayer de la recién nombrada Primera Ministra, Liz Truss.
Apenas dos días después de ser nombrada por la Reina Isabel II, la Primera Ministra dijo que Su Majestad había sido «la Roca sobre la que se construyó la Gran Bretaña moderna».
Estoy de acuerdo. Estoy seguro de que todos lo estamos. Pero voy más allá. Ella fue nuestra Reina.
Gibraltar era SU Roca.
Y ella era la nuestra.
Como dijo de su propio marido, el Duque de Edimburgo, ella era nuestra fuerza y nuestro apoyo. Nuestra roca en tiempos difíciles.
Y durante todo el tiempo que ocupó el trono, Su Majestad siempre fue conocida por preocuparse profundamente por su pueblo en Gibraltar.
Valoramos mucho su visita en 1954.
Una visita que dejó una marca indeleble en nuestra pequeña nación, entonces emergente, y que forjó entre nuestra Soberana y los gibraltareños una RELACIÓN ESPECIAL sin igual.
A su manera, su visita marcó la pauta para los años venideros y sirvió para definirnos y consolidar nuestra lealtad a la Corona.
Una lealtad a la que ella correspondió con la suya hacia nosotros y todos nuestros conciudadanos británicos.
Al acceder al trono, cuando la Reina Isabel dedicó su vida al servicio, expresó su compromiso de que lo hacía de por vida.
Se convirtió en un ejemplo de servicio y de respeto al Estado de derecho.
Recientemente, lo demostró acatando estoicamente las normas de Covid para guardar el luto por el amor de su vida, el Duque de Edimburgo.
Y lo ha demostrado también sirviendo literalmente hasta las últimas horas de su vida. 48 horas antes de su muerte, le pidió a la sra. Truss que formara gobierno. Tuvo a su servicio a 15 Primeros Ministros.
Y también tuvo a su servicio a 6 Ministros Principales de Gibraltar.
Tuvo innumerables Presidentes y Primeros Ministros a su servicio en todos sus Territorios y en la Commonwealth.
Pero también fue madre, abuela y bisabuela.
Y hoy hacemos llegar nuestro pésame también a los miembros de su familia que lloran no sólo a una monarca, sino también a una matriarca y a una madre.
Lo hago en nombre de todos los miembros del Gobierno de Su Majestad de Gibraltar, de todos los ministros, de todos los miembros del Parlamento, así como de todos los funcionarios y de toda la Administración Pública. Y, de hecho, en nombre de todos y cada uno de los gibraltareños y residentes en Gibraltar.
Al reflexionar para Gibraltar sobre la vida de servicio de la Reina Isabel, creo que debemos reflexionar sobre el hecho de que fue la Reina de todas nuestras Constituciones hasta la fecha.
Como nuestra Reina, fue la Jefa de nuestro Ejecutivo y fuimos expresamente uno de sus Dominios. Fue bajo su mandato que se hicieron esas Órdenes en Consejo.
Cada paso en nuestro camino hacia un mayor autogobierno hasta la fecha fue establecido y afianzado en su tiempo en el trono.
Nos emancipamos a la autonomía que tenemos hoy en día en la gloriosa segunda época isabelina. Así que la profunda devoción del Gibraltar moderno a la Corona se debe a su reinado. Hemos experimentado los frutos de la estabilidad y coherencia de su largo reinado. El más largo de cualquier monarca británico hasta la fecha.
Sin embargo, incluso en este día tan triste, también querremos recordar a nuestra Reina con una sonrisa.
Qué mejor epitafio para esta Monarca nuestra que su elegante encuentro con James Bond en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de 2012 en Londres.
O el más reciente corto con el oso Paddington cuando todos celebramos su Jubileo de Platino.
Estoy seguro de que todos querremos recordar su traviesa sonrisa mientras Paddington servía el té en el Palacio de Buckingham.
Y su sonrisa de bienvenida en Balmoral a su nueva Primera Ministra, la tercera mujer a la que pidió que formara Gobierno.
Ciertamente, tenía estilo y garbo en abundancia. Y lo demostró en todos sus actos y compromisos públicos. Por todas estas razones y muchas más, Su Majestad estará siempre en nuestros corazones.
De hecho, durante la posguerra y cuando las restricciones del General Franco eran cada vez más duras, la devoción y la lealtad del pueblo británico de Gibraltar por la Reina Isabel como encarnación de la Corona se fueron haciendo cada vez más profundas.
Cada vez más cerca. Cada vez más fuertes.
Y ella estrechó tanto esos lazos que están cimentados para siempre y no harán sino profundizarse aún más con nuestro nuevo Monarca y sus futuros sucesores.
Mis queridos amigos, Hoy es nuestro Día Nacional más triste.
Aunque este año no celebraremos el Día Nacional de la forma tradicional, quiero desear a todos los gibraltareños un feliz día, aunque esté teñido de tristeza por el fallecimiento de nuestra querida Reina Isabel.
Sé que la cancelación del Día Nacional es también un duro golpe, teniendo en cuenta las ganas que teníamos todos de volver a celebrarlo juntos por primera vez desde 2019 tras la pandemia.
Este año se celebra el trigésimo aniversario de la primera celebración del Día Nacional.
Para mañana, Su Majestad la Reina me había enviado un mensaje que debía leer a todos los reunidos en Casemates.
Era un mensaje ya entregado antes de su muerte.
Su Majestad comunicó su mensaje a través de su querido y antiguo ayudante, el ahora Gobernador, Vicealmirante Sir David Steel.
Su mensaje dice lo siguiente:
«Al celebrar la importante ocasión de su Día Nacional, me gustaría felicitarle, Ministro Principal, y enviar mis mejores deseos al pueblo de Gibraltar. Mientras superamos juntos los problemas de salud mundiales con determinación y fortaleza, esperemos que vengan tiempos mejores en el futuro. Elizabeth R».
Sé que guardaremos para siempre ese mensaje de nuestra querida Reina Isabel.
Este año seremos una nación que seguirá siendo roja y blanca. Pero estaremos tan tristes como orgullosos.
En gran medida como resultado de nuestra RELACIÓN ESPECIAL con la Reina Isabel y la Familia Real, no nos sentiremos menos rojos, blancos y azules.
No menos rojos, blancos y orgullosos.
Y no menos rojos, blancos y libres.
Porque esa LIBERTAD es la que nos ha proporcionado la era isabelina.
Mañana, cuando no esté en misión oficial del Gobierno, seguiré vistiendo de rojo y blanco, con un lazo negro también para recordar la pérdida de nuestra Reina.
Así que hoy quiero que todos se unan a mí para DEDICAR EL TRIGÉSIMO DÍA NACIONAL GIBRALTAR A LA MEMORIA DE LA REINA ISABEL SEGUNDA.
Para celebrar su memoria.
Para agradecer su vida, su compromiso con el deber y su dedicación a todo el pueblo británico.
Y para conmemorarla dedicándole nuestro día más preciado.
Conmemoraremos el día de una manera más silenciosa.
La bandera de Gibraltar ondeará sobre el Ministerio de Asuntos Exteriores en Londres, en nuestro honor.
Ondeará a toda asta, ya que el Rey Carlos III será proclamado Rey en Londres.
También acabo de recibir una carta de la Primera Ministra felicitándonos por nuestro 30 Día Nacional y compartiendo su dolor con el pueblo de Gibraltar.
Así pues, les insto a que disfruten del día con sus familiares y amigos, teñido de tristeza como estará, conmemorando el gran recuerdo de nuestro antiguo soberano.
Háganlo con respeto, con sus familias y amigos, ya sea en playas, hogares y restaurantes de nuestra nación.
Les pido que, en un momento adecuado durante su comida, brinden todos respetuosamente por la memoria de nuestra difunta y querida Reina Isabel.
Y pido que también brindemos por la buena salud y el éxito de nuestro nuevo monarca y soberano, el Rey Carlos III, Rey de Gibraltar.
La Proclamación formal del Rey Carlos como Rey de Gibraltar tendrá lugar en Gibraltar el domingo a mediodía en el Convento.
Este evento será retransmitido en directo en las pantallas de Casemates. El domingo, todas nuestras banderas ondearán a toda asta durante un solo día.
Después volveremos a ondear a media asta hasta el final del luto, el día después del funeral de la Reina Isabel.
En los días siguientes a la Proclamación tendremos tiempo para reflexionar también sobre nuestra declaración de lealtad y fidelidad a Su Majestad, el Rey Carlos III, Rey de Gibraltar.
Una nueva era carolina nos llama.
Por ahora, sé que todos ustedes se unen a mí para desear que la Reina Isabel II descanse en paz eterna.
Que Dios bendiga a Gibraltar. Dios salve al Rey. Larga vida al Rey”.