El desplome del turismo internacional provocado por pandemia constituye uno de los principales factores por los que la industria turística se encuentra hoy al borde del colapso. Este derrumbe en las cifras de visitantes extranjeros incide de forma drástica en el sector alojativo español, que, tras un verano desastroso, da paso ahora en algunas zonas de España, como Canarias, a la temporada alta de invierno. Por ello, para evitar que los estragos de la crisis provocada por la COVID-19 sigan minando la industria, la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) urge al Gobierno a poner en marcha corredores seguros para reactivar el turismo y evitar la pérdida de la temporada invernal y la destrucción definitiva de miles de puestos de empleo y empresas. Con este fin, la propuesta de iniciar un proyecto piloto con Canarias de carácter inmediato puede aportar soluciones para que parte de todas las zonas o destinos que alcancen los objetivos sanitarios marcados puedan establecer sus propios corredores, con independencia del segmento turístico donde se ubiquen (urbano, vacacional, nieve, etc.). El binomio turismo-seguridad es esencial para que se pueda producir el hecho turístico, por lo que es imprescindible trabajar ya con todas las herramientas disponibles para incrementar la seguridad de los turistas y los trabajadores del sector. A este respecto, Jorge Marichal, presidente de CEHAT, insiste en que “es urgente y fundamental establecer y aplicar las medidas sanitarias necesarias para que se eliminen las actuales restricciones, recomendaciones y cuarentenas en el ámbito de la Unión Europea, que amenazan la temporada de invierno con consecuencias ya irreversibles para la economía de estas zonas”. Desde el comienzo de la desescalada y la reapertura de hoteles y alojamientos turísticos en julio, los protocolos sanitarios han probado su eficacia a través de la inexistencia de casos positivos desde verano. En estos momentos, una de las soluciones de aplicación más importante y urgente es la entrada en vigor de los corredores seguros, que la propia ministra de Turismo, Reyes Maroto, confirmó la semana pasada durante su visita a Canarias. La implantación de estos corredores deberá ir asociada, indiscutiblemente al control de la curva de contagios.