Ya se ha anulado también la Noche de “Tosantos” en Algeciras. El Coronavirus está arrancando de cuajo la esencia de las personas, de las ciudades, en definitiva, de una forma de vivir.
Algeciras es una ciudad con un arraigo extraordinario en sus tradiciones, en su cultura, en su forma de entender la vida. Me imagino que como cualquier otra ciudad. Y se fusionan esas tradiciones con lo moderno. Parte de eso se va perdiendo por el camino pero no puede perderse lo fundamental. Es necesario que desde el Ayuntamiento y desde todas las instituciones posibles se intente aliviar el efecto que el coronavirus nos está causando.
Perdimos las Semana Santa, la Feria, la Fiesta de las culturas del Estrecho “Entremares” que hace tres años, tuve el honor de pregonar. Y, ahora, lo más probable, seguro, que perderemos, el arrastre de latas y la Cabalgata de Reyes Magos. Y aunque hacer una cabalgata como en años anteriores es impensable, hay que encontrar una alternativa que disfrace uno de los días más entrañables del año con alegría e ilusión, y que no parezca el paradigma de la decadencia con las calles vacías solo con el ruido de los motores de los coches.
Creo que se puede ilusionar a los niños sin aglomeraciones , se puede conseguir que tengan la sensación de estar viviendo ese día tan distinto a otros años pero tan especial.
Es imprescindible que intentemos vivir con cierta normalidad, que hagamos uso de nuestra creatividad para que seamos capaces de convertir la situación actual en algo más llevadero y cercano a lo que hemos tenido en años anteriores.
No nos podemos rendir y dejar que el mundo se modele de esta forma que nos está haciendo totalmente infelices.
La Cabalgata de Reyes, y la víspera de Reyes en general, es un evento extraordinario que se puede realizar de muchas maneras y está claro que del modo tradicional es inviable. Hay que encontrar un sustituto (Esto vale para todas las ciudades) porque es muy importante para nuestros niños.
Algeciras, 7 de octubre de 2020
Patricio González
