La directora general de Calidad, Innovación y Fomento del Turismo, Carmen Arjona, defendió que el decreto regulador de viviendas con fines turísticos aprobado en Andalucía en febrero de 2016 ofrece las garantías necesarias para ordenar una importante oferta de inmuebles destinados al alojamiento privado para el turismo, evitar la competencia desleal y proteger los derechos de los consumidores durante su estancia.
Arjona, que participó en una mesa redonda especializada sobre esta materia en el Congreso Internacional de Turismo de Interior en Plasencia (Cáceres), recordó que la regulación de este tipo de alojamiento ha recaído en las comunidades autónomas a partir de su exclusión del ámbito de aplicación de la Ley de Arredamientos Urbanos (LAU), dando lugar a una normativa adaptada a las particularidades de cada territorio.
En este sentido, precisó que en Andalucía se aprobó a principios del pasado año un decreto regulador de viviendas con fines turísticos, para integrar este tipo de alojamiento a la oferta reglada, facilitar la coexistencia con el resto de modalidades, además de para garantizar unos requisitos de calidad en la prestación del servicio, y cuya aplicación hasta la fecha ha permitido contabilizar más de 33.000 inmuebles.
Carmen Arjona explicó que la norma regional establece la inscripción obligatoria de esta oferta en el Registro de Turismo de Andalucía (RTA), en el que crea una categoría específica para aquellas viviendas ubicadas en suelo residencial que ofrecen servicio de alojamiento de forma habitual y que se comercializan a través de canales como las plataformas de reserva o agencias especializadas en esta oferta.
Además, la directora general de Calidad, Innovación y Fomento del Turismo precisó que esta obligación de inscripción en el RTA se recoge tanto para las viviendas completas -que se ceden en su totalidad y no pueden superar las 15 plazas-, como para las que se alquilan por habitaciones, en las que obligatoriamente tiene que residir el propietario y no deben exceder de seis plazas.
Garantía de calidad
Carmen Arjona detalló, asimismo, que el decreto tiene como objetivo ofrecer a los clientes y turistas garantías en la prestación de servicios durante su estancia, puesto que se recogen una serie de requisitos mínimos de calidad y confort equiparables a otras modalidades de alojamiento, en cuanto a condiciones de ventilación, refrigeración, mobiliario, menaje, seguridad e información, entre otras.
Finalmente, Arjona concluyó que la vigilancia de estas garantías se completa con la incorporación de esta tipología al Plan de Inspección en materia turística que anualmente desarrolla la Junta, con el que se actúa de oficio en las propias viviendas y en las plataformas de comercialización, a partir de la programación de actuaciones previstas o de denuncias de particulares y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.