En los dos últimos años, desde que en 2014, Podemos consiguió dar la sorpresa y lograr cinco años en Estrasburgo o tal vez quizás antes desde la Facultad de Ciencias Políticas de y de Sociología de Madrid en la que un grupo de jóvenes bajo el impulso y la tutela del profesor Monedero decidieron crear una organización política, hay muchas cosas que han cambiado.
Los protagonistas de esta historia han logrado en un tiempo record transformarse en personajes distintos, aunque también parecen personas diferentes. No ya porque hayan madurado sino porque han mutado. Dice el diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, en la primera de las acepciones que la metamorfosis es la transformación de algo en otra cosa.
No voy a incurrir en la osadía de ver las analogías entre el cambio podemita y la novela de Franz Kafka en la que el protagonista, Gregorio, comienza una nueva vida en su cuarto convertido en insecto ni tampoco voy a beber en esa gran obra clásica del poeta romano Ovidio que en quince libros nos narra la historia del mundo desde su creación hasta la deificación de Julio Cesar entre la mitología y la historia.
Pero bien podríamos encontrar en la breve existencia de los podemitas algunos elementos que pudieran establecer una cierta semejanza con estas dos joyas literarias. Los protagonistas de este movimiento que como académico, se trasladó a la esfera social a través de los círculos para abrazar la religión partidaria, es todo un proceso que con mayor perspectiva temporal estudiarán los tratados políticos en el futuro.
En estos días en los que sus deseos del sorpasso al PSOE no se han hecho realidad y que en ese afán por alcanzar los cielos, soñaban con ganar las Elecciones al PP y verse instalados en el Palacio de la Moncloa, se ha dicho y analizado desde todos los ángulos las razones del fracaso de la coalición UNIDOS PODEMOS.
Por eso tal vez, distanciándonos de los resultados del 26 J y observando detenidamente la transmutación de Pablo Iglesias y sus seguidores podamos entender con mayor claridad y rigor el efecto gaseosa de una fuerza que viene para quedarse, pero que en su velocista afán de alcanzar el poder puede terminar como empezó en charlas y discusiones del claustro Universitario.
Así que no pretendo añadir una reflexión más al panorama de la actualidad sobre las razones del fracaso de los morados, y que ellos continúan analizando y para lo cual incluso han encargado una encuesta con una serie de preguntas entre militantes y simpatizantes, pero que ellos mismos como han manifestado algunos de sus líderes no terminan de aclararse
Es más en la reunión en la que se inició el análisis en profundidad de las causas de que no funcionara la colación UNIDOS PODEMOS y que finalizó tras dos horas según ellos de discusiones fraternales, no olvidemos que en la Biblia se nos narra entre otros crímenes entre hermanos como Caín mató a Abel.
Pues al terminar en un ejercicio de seriedad y rigor Iglesias lo despacho ante la prensa con un lacónico ha sido fructífera y con una profunda petición dejarnos que nos vayamos a tomar una caña que hace mucho calor. Es un síntoma más de la falta de respeto y frivolidad no solo ante los medios como notarios de la realidad sino hacía el conjunto de la ciudadanía
La finalidad de este artículo es ofrecer mi humilde aportación a la METAMORFOSIS de los del círculo, sin que esto suponga culpabilizar a nadie, sino como las actitudes y los comportamientos de la dirección de PODEMOS han ido modificándose, ya que la coalición con IU fue algo de última hora y esta transformación se ha venido fraguando en un proceso sorprendente, desconcertante y continuo.
Podríamos escribir una tesis doctoral sobre esta conversión que probablemente nos asesoría con gusto el señor Monedero, pero no quiero ser ni pretencioso ni aburrirles con todo tipo de datos y sus correspondientes consecuencias.
Así que nos quedaremos en la superficie de lo que todos hemos podido contemplar, constatar y comprobar en este tiempo desde el nacimiento hasta nuestros días, tras el patinazo del 26 J, de una formación que si en un principio convulsionó el panorama político, va poco a poco por el camino de la decepción hacia la frustración de sus dirigentes y el enfado de muchos de sus electores.
Sin seguir un orden, ni cronológico ni de importancia sino atendiendo más bien a su transversalidad que era uno de los principios más defendidos por los podemitas en sus comienzos, pasaron de la Facultad, a los círculos, recogieron las influencias del 15 M para después aparcarlos e incluso olvidarlos, de ahí a la calle y a las mareas y en un salto a los despachos, lo que le supuso para algunos del ser descamisado a colocarse la corbata o la palomita aunque fuera flojita.
Este tránsito ideológico de ser antisistema a llegar a la socialdemocracia pasando por el comunismo está lleno de contradicciones, ayer, según ellos, los de Izquierda Unida eran unos tristes sin futuro hoy son sus aliados necesarios que han sido devorados por el ansia de poder de Iglesias y sus seguidores.
A lo largo del tiempo se han instalado en una película entre la fantasía de Juego de Tronos y el clásico de lo que El viento se llevó, que les ha hecho hablar de que el acuerdo con Garzón les había lanzado a ser la fuerza hegemónica de la izquierda cuando los resultados arrojaron una pérdida de 1,2 millones de votos.
También los personajes de la cúpula podemita han sufrido un transformismo entre la realidad y la ciencia ficción, con un líder entre lo sectario y lo mesiánico que ha pasado de la ira a las palabras amables, de recoger simpatías y adhesiones a provocar cada vez más rechazos y antipatías por su actitud pedante y altanera.
Por cierto habrá que analizar con pausa, calma y profundidad cuanto de negativo ha provocado Pablo Iglesias en los malos resultados electorales. Ya que él muy hábilmente ha querido desviar permanentemente la atención a que la gente aunque les tenían un gran amor y simpatía les habían provocado miedo a qué gobernaran.
Usted ha sido un soberbio con malos modos y carente de humildad. Con autocrítica cero y un gran desacuerdo interno, ya que mientras Errejón culpa a una coalición sin éxito, el señor Iglesias y la señora Bescansa denuncian al miedo y las mentiras Como si fuéramos tontos.
La pregunta , señor Iglesias no es esa, sino que es lo que han hecho ustedes durante los últimos dos años para no merecer al final la confianza y por qué cuando tuvieron ocasión de apoyar un gobierno reformista con un Presidente Socialista en la persona de Pedro Sánchez, votaron ustedes que NO , al igual que el PP.
Quizás deberían ustedes reflexionar en un ejercicio de autocrítica que hasta ahora no le hemos visto hacer, como en esos bandazos y vaivenes ideológicos quisieron situarse tan a la izquierda del PSOE que nadie se podía creer que eran ustedes socialdemócratas, además de que vendieron ustedes la piel del oso antes de cazarla, al pecar de infantilismo al dar todo el crédito a las encuestas y no diferenciar entre expectativas, deseos y realidades.
Su lenguaje sonaba y continua siendo falso, no se puede pasar de la cal viva a la sonrisa de un país que lo está pasando putas, no se puede saltar de la participación integral al control total, modelo estalinista que tras la poesía predica extirpar las malas hierbas.
Ustedes, señor Iglesias en su METAMORFOSIS, han facilitado que en España tengamos una nueva legislatura con la derecha en el gobierno, y no han conseguido tocar el cielo pero nos dejan a todos en el infierno de las políticas de recortes y ajustes.
La vida no es un plató ni la política una película, con el mal perder y no aceptación de la discrepancia, lleno de mensajes difusos y contradictorios, que se acoplan a lo que conviene según los acontecimientos y las circunstancias.
Parecían que eran el aire fresco que necesitaba la política española pero han creado y alimentado una atmósfera viciada, con representaciones escenográficas, modelos de laboratorio, imposturas que simulan espontaneidades y personajes como Cañamero cuya premisa es transgredir la ley.
A lo que tenemos que añadir la ausencia de Programas realistas aunque nos lo vendan en catálogos, la demostración de su fracaso en los ayuntamientos en los que gobiernan y la autocomplacencia de verse ganadores antes de jugar el partido.
También han sido unos oportunistas que han dicho cada día lo mismo y lo contrario. Han dado por muerto al adversario. No han sabido encontrar el punto de equilibrio entre el ensoñamiento y el pragmatismo .Sin tener en cuenta que en muchas ocasiones lo más práctico políticamente es la coherencia y la ética.
En su autocrítica, que ha brillado por su ausencia podrían incluir la modernización del lenguaje y la superación de un concepto de lucha de clases decimonónico, el mesianismo del líder que ya no se lleva, el poder de la imagen sin nada dentro, los modelos superados y la simplificación de lo complejo bajo consignas populistas en una mercadotecnia de vendernos los productos a la carta que más nos gustan en cada momento o el uso de las emociones primarias para evitar el debate.
De todas formas el análisis de de cara a la estrategia futura queda reflejado en las palabras de sus dos líderes más referentes Errejón que se dejó caer diciendo No queda eliminada la posibilidad de que Podemos gobierne pero será otro Podemos. Menos sexy o lo afirmado por Pablo Iglesias Me acojona pasar de partisanos a ejército regular: No nos tiene por qué ir bien ¿Cómo se les queda queridos lectores el ánimo? Imagino que desorientado y si me apura un tanto cabreado.
Tampoco han sabido interpretar la voz de la calle que no quería revoluciones sino soluciones a sus problemas y han convertido ustedes una ilusión en una pesadilla. No suman, dividen. . Si no se aclaran ustedes como pretenden que lo hagan los electores.
Juan Antonio Palacios Escobar