El destructor “José Luis Diez” fue el protagonista en 1938 de episodios relacionados con Gibraltar, donde el barco republicano se refugió y al querer abandonar de noche y sin luces el puerto de Gibraltar, una española falangista Natalia Larios residente en Gibraltar lanzó una bengala para avisar a las unidades del bando franquista que esperaban ese momento, cuenta el historiador gibraltareño Tito Vallejo.
El crucero “Canarias” se dio de frente con el destructor republicano. Y los minadores “Vulcano” y “Neptuno” lo rodearon. El capitán puso rumbo a las playas de La Caleta para volver a refugiarse en Gibraltar donde permaneció varios meses. Se dice que a pesar de haber infringido daños de consideración al destructor y de que algunos cañonazos impactaran en La Caleta, los barcos de Franco respetaron los límites de las aguas territoriales británicas de Gibraltar y no fueron capaces de adentrarse en ellas.
El relator de muchos de los momentos históricos que vivió Gibraltar durante la guerra española, el popular Antonio Bernal (qepd), de Casa Bernal, en Campamento, trabajador muchos años en un bar de Gibraltar, relataba que conoció personalmente al capitán del “José Luis Díez”, Juan Antonio Castro Izaguirre y por tanto conoció las vicisitudes que tuvo que soportar.
Durante el tiempo que el barco permaneció en Gibraltar, los sindicatos gibraltareños apoyaron al capitán y a la tripulación y manos gibraltareñas bordaron la nueva bandera que habría de enarbolar el barco.
Esa bandera volvió a Gibraltar y se guardó en el Museo de Gibraltar donde tantos testimonios de la historia del peñón se conservan con vestigios que se remontan a los neardenthales que vivieron en el Peñón y de todas las épocas que ha vivido la Roca. Se recomienda la visita al Museo.
Este fin de semana, la Bandera de Combate del destructor republicano “José Luis Díez” ha salido a la calle para protagonizar la presentación del libro escrito por Francis Silva, Luis Miguel Cerdera, Gareth Stockey y Debbie Eade, con una introducción de Chris Grocott. Con un agradecimiento especial a Michael Netto, quien fue la fuerza motriz para la preparación del libro en Gibraltar.
Al acto han asistido muchos sindicalistas, así como el ministro principal Fabián Picardo, quien ha recordado con emoción, como su abuela, de tendencia republicana procedente de Los Barrios le hablaba de que ella había ayudado a bordar la bandera
Al respeto, Fabián Picardo ha escrito en su muro de Facebook: “Ayer fue uno de los días más orgullosos de mi vida. Me conmovió enormemente la presentación de un libro sobre la historia del barco republicano español, el José Luis Díez y su estancia en Gibraltar.
Ese buque sufrió el ataque de las fuerzas fascistas franquistas y terminó en Gibraltar. Mientras estaban aquí, la gente trabajadora se organizó para recaudar fondos para comprar al buque una nueva bandera de batalla, la alférez republicana española.
Le correspondió a mi abuela materna, María Magdalena Massetti (originaria de Los Barrios y una ardiente republicana en su adolescencia (aún la recuerdo contándome las historias)), que era una talentosa costurera, coser la tela.
Mi abuelo, Enrique Massetti (de origen genovés), dibujó el emblema de la República. Enrique murió al año siguiente en un accidente industrial, enterrado vivo bajo las arenas rojas (irónicamente) en la zona de Jardines de la Alameda cuando algunas obras se derrumbaron. (Su hijo, mi tío, Henry Massetti, también fue un artista y joyero de renombre (Cellini’s) y en ocasiones ha diseñado y realizado los pergaminos que se entregan con nuestra máxima distinción “Freedom of the City”).
Me ha emocionado tocar y tenert entre mis manos esa bandera republicana con tan entrañable significado ideológico y vínculo familiar para mí y mi familia.
Fue la primera vez que veo la bandera fuera de su expositor de vidrio y confieso que me ha parecido bastante impresionante por todo lo que encierra.
También he de decir que fue muy reconfortante conocer a los hijos del capitán del destructor, Juan Antonio Castro Izaguirre y escuchar sus historias y las penurias y el exilio de su padre durante los años fascistas en España, dando como resultado su exilio permanente en Francia y su lucha junto al General Charles de Gaulle y los franceses libres que formaron parte de las fuerzas aliadas que derrotaron a los poderes del Eje”.
Picardo muy emocionado dice: Clive Finlayson y Geraldine Finlayson trajeron la bandera, ‘como oro en paño’ desde el Museo de Gibraltar, donde forma parte de tantos vestigios históricos.
Ayer fui un nieto orgulloso. También tenía el corazón roto porque nunca conocí a Enrique Massetti y que le dijera un último adiós a María Magdalena (Mamá) hace más de una década, a la madura vejez de más de 100 años. Pero aún recuerdo las historias que ella me contaba de reuniones políticas clandestinas en los bosques alrededor de Los Barrios y les contaré a mis hijos para que entiendan porque la extrema derecha nunca debe oler el poder en ningún lado nunca más…”.
El veterano diario “Gibraltar Chronicle” que es el más antiguo que existe en la península ibérica ha dedicado un gran reportaje a este evento.