UGT Andalucía denuncia que la violencia de género constituye una de las más terribles lacras sociales, que atenta contra los derechos humanos de las mujeres y contra el derecho fundamental a la igualdad. Este 25 de Noviembre, Día Internacional contra la Violencia de Género, tenemos aún mucho que reivindicar, puesto que 44 mujeres asesinadas en España por Violencia Machista, 7 asesinadas en Andalucía, es un terrible indicador que muestra que no se están poniendo los recursos necesarios en la protección a las víctimas.
Desde el 2003, 180 mujeres han sido asesinadas en Andalucía a manos de hombres que decían quererlas. En lo que va de año, según cifras oficiales, ya hay 7 mujeres muertas por violencia machista en nuestra comunidad autónoma, además de un menor, 8 menores en España a quienes han asesinado padres maltratadores que tenían el deber de protegerles. Además, 23 menores han quedado en una dramática situación de orfandad por esta causa.
En cuanto a las denuncias, según el Portal Estadístico de la Delegación del Gobierno de Violencia de Género, en Andalucía se registran, en 2017, 17.614 denuncias por violencia de género y 4.311 órdenes de protección, un 41% menos de denuncias presentadas y un 48% de órdenes de protección concedidas con respecto a los mismos datos de 2016. A falta de algo más de un mes para que finalice el año, llama la atención que haya casi 11.800 denuncias menos, creemos que, además del miedo hacía sus agresores, las víctimas perciben que no serán suficientemente protegidas y desisten de denunciar, cuestión que nos parece muy grave y ante la que tenemos que reaccionar tanto los poderes públicos, como los agentes y demás organizaciones sociales.
Tan solo un 24% de las denunciantes consigue órdenes de protección, no llegan ni a la mitad las que tienen protección policial, solamente un 3% consigue ayudas para cambiar de residencia, un 2% cuenta con dispositivos electrónicos de protección, y ni siquiera un 1% ha podido acceder a ayudas económicas por ser víctimas de violencia de género.
UGT Andalucía, como organización sindical entiende que, para que las víctimas puedan sobrevivir a la situación de violencia, además de protección de sus agresores, es fundamental garantizar su acceso a recursos económicos suficientes, bien garantizando el mantenimiento de sus puestos de trabajo si lo tienen, bien teniendo oportunidades de desarrollo profesional.
En Andalucía hay escasísimos contratos de trabajo bonificados a víctimas, aún menos de sustitución. De las denunciantes este año solamente un 1% y un 0.2% han conseguido un contrato bonificado o uno de sustitución, respectivamente. Estos datos hay que mejorarlos.
Por otro lado, UGT Andalucía sigue manifestando que el Acoso sexual y el Acoso por razón de Sexo son formas de Violencia de Género en los centros de trabajo, ante las que tenemos que actuar. Solicitamos campañas de información y sensibilización, estudios de datos e indicadores actualizados en Andalucía, y sobre todo, recursos públicos de asistencia psicológica y jurídica a las víctimas.
Desde UGT Andalucía te animamos a participar en las movilizaciones que se convoquen en tu localidad contra la Violencia de Género. #NiUnaMenos.
CCOO
No me trago este sapo. Escribo mi propio cuento. Este ha sido el lema elegido por CCOO para denunciar las violencias machistas en un año en el que la cifra de mujeres asesinadas a manos de sus parejas o ex parejas, ya dobla la de 2016 y hace que Andalucía siga siendo la Comunidad con mayor número de asesinatos machistas.
CCOO de Andalucía, que ha convocado o participa en numerosas manifestaciones y acciones programadas para los días previos al 25N en todas las provincias, insiste en la importancia que tiene la independencia económica de la mujer para luchar contra esta lacra social. Por ese motivo, y aunque valora el tan demandado por el sindicato Pacto de Estado contra la Violencia de Género, la secretaria de la Mujer de la central sindical, Yolanda Carrasco, lamenta que adolezca de medidas en el ámbito laboral novedosas que den mayor seguridad a las víctimas. Con la importancia que tiene la independencia económica que ofrece un empleo estable y de calidad, el Pacto contempla poco más de una decena de medidas directamente dirigidas al ámbito laboral.
Otro capítulo que Carrasco ha resaltado es el de la falta de información que tienen las mujeres víctimas de violencia de género de los derechos laborales y económicos que se les reconocen, y se ha referido a la Renta Activa de Inserción, que ha ido bajando en número de preceptoras desde hace siete años hasta situarse en las 7.650.
La dirigente asevera que en la mayoría de las ocasiones las mujeres desconocen la existencia de esos derechos pero también denuncia que hay empresas reacias a ponerlos en marcha como lo demuestra el hecho de que los contratos registrados que son bonificados sigan siendo muy escasos (124 en lo que va de año) y de ellos el 76,6% temporales. Ese dato pone de manifiesto que las víctimas que acceden al mercado laboral lo hacen con contrataciones en su mayor parte precarias y poco estables, -7 de cada 10 contratos realizados a mujeres víctimas de violencia de género en 2017 han sido temporales-, lo que dificultan su salida de esa situación de vulnerabilidad por falta de independencia económica.
CCOO denuncia que actualmente las mujeres sufren discriminación laboral en todas sus fases, -datos del Barómetro de la UE indican que 3 de cada 4 mujeres de alta dirección han experimentado acosos sexual en su ocupación profesional-, y que la precariedad laboral a la que se enfrentan, la imposibilidad de acceder a determinados puestos de trabajo o promocionar profesionalmente, unido a la brecha salarial que hay entre hombres y mujeres, son elementos que hay que derrocar para que la violencia de género desaparezca, pues no olvidemos que la igualdad laboral es una pieza esencial para luchar contra esa lacra.