Marbella se ha sumado a la campaña de prevención de incendios en el interfaz urbano forestal puesta en marcha por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.
El alcalde, José Bernal, ha asistido a la presentación de la campaña junto al delegado provincial de la Junta de Andalucía, José Luis Ruiz Espejo, y el delegado de Medio Ambiente de la Junta en Málaga, Adolfo Moreno.
Bernal ha agradecido a los representantes del Gobierno autonómico que estén desarrollando esta iniciativa en el municipio y ha subrayado la importancia de la concienciación y la prevención para evitar incendios forestales.
Ha destacado la labor que está realizando el Ayuntamiento, a través de la delegación de Sostenibilidad, en este ámbito y ha especificado que en 2016 y lo que va de 2017 se han hecho 174 requerimientos de planes de autoprotección contra incendios forestales a urbanizaciones y han sido satisfechos 160 con la presentación de los mismos.
El alcalde ha recordado que Marbella se vio afectada en el año 2012 por el incendio de Barranco Blanco y ha señalado que el Consejo de Ministros acordó otorgar al municipio ayudas de emergencia y a día de hoy, cinco años después, seguimos sin recibir un solo euro.
Ruiz Espejo, por su parte, ha explicado que la campaña comenzó ayer en Casares y continuará en Coín, Mijas y Nerja, donde finalizará el viernes. Ha recordado que esta tarde tendrá lugar en las terrazas del Puerto Deportivo de Marbella una gymkana para concienciar a los más pequeños sobre la importancia de la prevención para evitar incendios.
Espejo ha indicado que la campaña se centra especialmente en las áreas de transición entre zona urbana y forestal porque son las más vulnerables y, por ello, se dan una serie de recomendaciones básicas a los propietarios de parcelas y urbanizaciones sobre elementos constructivos y vegetación, entre otras, para evitar negligencias que puedan derivar en incendios forestales.
Ha especificado que en lo que va de año se han realizado un total de 115 intervenciones en la provincia de Málaga, de las que 53 han sido forestales y han afectado a 210 hectáreas y 62 han tenido lugar en suelo agrario urbano afectando a 362 hectáreas.