Meritorio rey emérito
eres Juan Carlo Primero
por abortar la asonada,
mas un tema de dinero
con nuestra insaciable Hacienda
-que nos hurta el billetero
con su sucio guante blanco-
te ha manchado por entero.
¡Págale con calderilla
a este Fisco pesetero!
*
Practican el jaque al rey
las aves de mal agüero,
que son los republicanos,
los que con garras de acero
atacan la Monarquía
con arte bastante artero.
Los de la hoz y el martillo
se unen al desafuero.
Matar reyes, según ellos,
es deporte placentero.
*
Alfonso como Isabel
y Fernando el “justiciero”
conocieron el destierro
y el exilio verdadero.
Les ponemos la corona
y después, al basurero.
A los judíos y moros,
con patada en el trasero,
los mandamos desde aquí
a ese mismo paradero.
*
No comparto esa postura,
pero en algún avispero
te has metido motu proprio
como en el lío faldero
con la afamada Corinna
y has recorrido el sendero
de otros Borbones infieles.
Tu talante traicionero
no lo merece Sofía.
“Me casé con un fullero”
musitará la gran dama
por tu proceder rastrero.
¿Y el daño que le has causado
a Felipe, tu heredero?
Ciérrate bien la bragueta
y contén tu deseo fiero.
No quieras ser más el gallo
en tu nuevo gallinero,
pues al gallo de Morón
le arrancaron el plumero.
Con las ascuas de la líbido
no hagas más de fogonero.
*
De este no justo destierro
deja de ser prisionero.
En ese refugio de oro
no eres sino un forastero.
¿Con chilaba y con turbante,
entre tanto camellero,
ha de morir rey cristiano
en un país extranjero?
¡Vuelve a Palacio, ¡por Dios!,
que ha de ser tu hogar postrero!
JUAN MANUEL
BALLESTA GÓMEZ
(Monárquico, sin carné,
aún sin saber por qué)