Sergio García ha finalizado la segunda jornada del Andalucía Valderrama Masters a un golpe de la cabeza tras firmar una vuelta al par del campo. El castellonense se mantiene en la pelea y junto a Pablo Larrazábal, a cuatro golpes, son las mejores opciones españolas para el fin de semana. El líder es Joost Luiten, (-6) quien ha protagonizado el golpe del día, un espectacular albatros en el hoyo 11.
Sólo 15 jugadores llegan al fin de semana bajo el par del campo. Y es que, como explicaba Sergio tras su vuelta, Valderrama es Valderrama. Siempre hay algo de viento, los greenes son muy pequeños, las banderas son peliagudas, y aunque los greenes estén blandos hay que pegar muchos buenos golpes. Si no lo haces, lo pagas.
Sergio se encuentra empatado con el inglés Robert Rock y el escocés Scott Jamieson.
Al mando de la clasificación se mantiene el holandés Joost Luiten que ha conseguido el primer albatros en el hoyo 11, par 5. Miguel Ángel Jiménez y Graeme McDowell lo habían logrado en el 17. Pegué un buen drive y tenía 209 metros basta la bandera, en buena posición desde el semirough. Con algo de viento a favor, era la distancia perfecta para un hierro 4. La toqué bien, picó en el green a un par de metros de la entrada, rodó y oí al público volverse loco. No lo vi desde allí abajo, pero sabíamos que había entrado. Un albatros siempre es especial y me alegro de haber logrado el primero en ese hoyo.
A cuatro golpes del holandés se sitúa Pablo Larrazábal, que ha completado una vuelta muy peleada (+2) para mantenerse con -2 en el total. Ha sido un día muy malo desde el tee. He pegado a 7 ó 8 árboles y he tenido que tirar hierro 4 ó 5 y madera a green. Se me ha hecho muy difícil, con lo mal que he jugado desde el tee, +2 es la mejor vuelta que podía hacer, comentaba.
La cruz de la jornada ha sido la de Jon Rahm, que no ha podido pasar el corte tras completar una vuelta de 75 golpes para un total de +7. Duele, esta era una semana especial y quería jugar bien. Es una pena que sea una de las tres semanas del año en las que no he jugado bien, pero esto es golf, se pasará. El próximo año volveré con algo más de experiencia.
Ha sido un tema mental. Sabía las ganas que tenía la gente de que yo jugara bien y le he dado demasiada importancia a cada golpe, no he jugado todo lo fluido que suelo jugar. Me he autotensionado, mentalmente no estaba fino porque me he impuesto la responsabilidad de jugar bien, explicaba.
El corte ha quedado situado en 4 golpes sobre el par y junto a Sergio García y Pablo Larrazábal, jugarán el fin de semana los españoles Alejandro Cañizares y Adrián Otaegui (Par), Pep Anglés (+2) Jorge Campillo y Carlos Pigem (+4).
Conocen a sus héroes
Gracejo, desparpajo, elocuencia e ilusión son cuatro magníficas bazas cuando hay que convencer. Si esas armas las esgrimen con soltura unos niños cargados de razón y buenas intenciones, no es de extrañar que sus interlocutores caigan rendidos. Eso es lo que ha vuelto a suceder hoy con los alumnos del Colegio Rural Agrupado Los Olivos de Brea de Tajo, un pueblo madrileño de 560 habitantes que cada vez acapara más titulares gracias a la iniciativa de estos niños.
Hace ya cuatro meses que se inauguró en su patio de colegio un putting-green fruto de un proyecto ideado por ellos -a través de la iniciativa mundial Design for Change en la que colabora la Fundación Telefónica-, y sufragado por varias instituciones. Hoy, 16 alumnos de Brea de Tajo han vivido el golf en mayúsculas en el Andalucía Valderrama Masters-Fundación Sergio García en un viaje organizado por la Federación de Golf de Madrid, y también tuvieron la oportunidad de comunicar a Nathan Homer, director comercial y de marketing del European Tour, su deseo de construir tres hoyos en su pueblo para seguir disfrutando de las bondades de este deporte. Los chavales han recorrido las instalaciones del RC Valderrama, se han comportado como auténticos profesionales en una improvisada rueda de prensa con su anfitrión, Nathan Homer, han visto a los mejores golfistas en acción y han podido cumplir un sueño más: hacerse fotos con algunos de los jugadores a los que admiran e incluso abrazar a sus héroes, Jon Rahm y Sergio García, que a su vez les transmitieron su cariño. Haré todo lo que pueda por ayudar; es lo más increíble que he escuchado estos días, resumía el jugador vasco, visiblemente emocionado. Las sonrisas siguen abriendo puertas y estos niños cada vez tienen más cerca alcanzar su nuevo objetivo.