Pasan los días desde que el Presidente del Gobierno de todos los españoles le ha ofrecido en bandeja de plata a Cataluña, la nada desdeñable cantidad de 4.200 millones de euros para infraestructuras, fundamentalmente, para el Corredor mediterráneo en su parte catalana. Ya la parte valenciana está prácticamente lista.
Mientras ocurre esto, nosotros seguimos aquí esperando año tras año, lustro tras lustro, el enlace ferroviario Algeciras-Bobadilla que uniría al primer puerto de España que es el nuestro, con Madrid y con Francia.
Pero aquí no ocurre nada. Aquí vino el Presidente Rajoy en campaña y nos dijo :Del tren me encargo yo. Aquí vino Chaves cuando era Ministro y lo prometió. Aquí vino Pepiño Blanco y también lo prometió. Y Ana Pastor y Susana Díaz. Y Zapatero y el susum corda. Aquí ha venido todo el mundo a reírse de nosotros. Y ni siquiera se ha comenzado el Apeadero de San Roque. Y ni siquiera está hecho el proyecto de la parte entre Ronda y Bobadilla que es el más largo. Este enlace no estará listo hasta, como mínimo, hasta el 2030.
Pero aquí ahora no viene nadie. El que se iba a encargar del tren se ha encargado del tren en Cataluña. Pero es que yo esperaba una reacción importante del PSOE y de la Presidenta de los andaluces (incluidos nosotros), Susana Díaz. Pero su respuesta ha sido muy Light. Y me extrañó, iluso de mí. Porque ya no sólo es nuestra Presidenta, ahora es una de las candidatas a la Secretaría General del PSOE, y, claro, para ser elegida necesita los votos de los socialistas catalanes. Por tanto, Susana Díaz no puede ejercer de Presidenta de los andaluces porque también tiene que rendirse a los pies de los catalanes. Esto demuestra que ya no ejerce de Presidenta sino de Secretaria General del PSOE.
Pero es que tampoco he escuchado a nuestro Diputado De la Encina, me imagino que por instrucciones de Susana.
El PP andaluz, creo, que ni siquiera se ha enterado del tema. Pero es que tampoco han abierto la boca ni Ciudadanos, ni Podemos ni nadie.
Nuestro Alcalde y senador permanece callado. Me imagino que tiene que ser difícil decir algo cuando los catalanes se han llevado el manso gordo de las infraestructuras.
Y esta es la situación. Ya va a ser difícil creerse nada porque ya no valen las promesas como la de: DEL TREN ME ENCARGO YO.
Patricio González