Dijo Correos públicamente que mientras se restauraba el edificio de la Calle Radio Algeciras (la ubicación de Correos en el centro de Algeciras), se iba a preparar un edificio en la calle Tarifa mientras serestauraba el otro.Ahora mismo, solo se atiende en la sede del Secano y las colas son tremendas a pesar del excelente trabajo de los empleados. Pero esto hace también que el ciudadano se enfade porque puedes estar hasta horas esperando.También se atiende en EL CORTE INGLÉS, en una pequeña oficina cuyas colas llegan hasta la zona de aparcamientos.Estamos hablando de Algeciras, una ciudad de 123.000 habitantes con una sola oficina de Correos y el pequeño despacho dentro de las instalaciones de El Corte Inglés.Muchos usuarios ( entre ellos, yo) utilizamos la oficina de Correos dela vecina ciudad de Los Barrios porque tardamos bastante menos que ir al Secano a Correos.
Pero en esta triste historia, Correos ha mentido y miente a nuestras autoridades, tanto al Ayuntamiento de Algeciras como al Presidente de la Mancomunidad de Municipios del campo de Gibraltar, al afirmar Correos a ambas instituciones de manera oficial que mientras se restaura la oficina de la calle Radio Algeciras se iba a habilitar una oficina en la calle Tarifa, concretamente en el edificio que antiguamente correspondía a Confecciones Contreras.De esto que les estoy hablando hace ya más de cuatro meses y el edificio de la calle Tarifa permanece totalmente cerrado y abandonado.
Y lo digo porque esta misma mañana me he acercado al al y lo he fotografiado. Allí nadie ha llevado a cabo obra alguna y está en las mismas condiciones de abandono de siempre (adjunto la fotografía de esta misma mañana).En todo esto, lo peor es como una Institución como Correos engaña aAyuntamiento y Mancomunidad y aquí no pasa nada.
Creo que es el momento de una acción importante al máximo nivel por parte de nuestras instituciones local y comarcal.Correos no solo se ríe de los ciudadanos algecireños sino también de las instituciones a las que falta al respeto con las mentiras. Y Algeciras no puede seguir abandonada de esta manera. Ya nos faltan al respeto hasta para recoger un paquete o echar una carta.
Algeciras, 5 de julio de 2022
Patricio González
Hace ya 37 años que España no registraba una inflación de dos dígitos: en junio se alcanzó el10,2%y todo apunta a la consolidaciónen lo que resta de año de un IPC(Índice de precios al consumo) muy elevado. El viernes se conoció la inflación en la zona euro, también en registros elevados (8,6%), pero, desde luego, dos puntos menos que la media española.Solo el hecho de haber llegado a ese 10% habría justificado la creación de una especie de gabinete específico, a modo de gabinete de crisis, en el seno del Gobierno de España para evaluar qué es lo que está pasando, qué se puede hacer y cómo paliar los efectos. Además, si se da por buena la famosa cogobernanza, en ese gabinetedeberían participar las comunidades autónomas, las corporaciones locales y, por supuesto, los agentes económicos. Sin embargo, la única respuesta del Gobierno que preside Pedro Sánchezes la del espectador pasivo, como si no pasara nada, como si no afectara a empresas y particulares lo que ocurriendo. Lo único que se ha hecho es aprobar un paquete de medidas anticrisis que fue elaborado antes de que se conociera esa inflación adelantada del 10% y con serias dudas sobre la capacidad real para ser efectivo -como ya está ocurriendo con la tan cacareada “excepción ibérica” en la regulación de la energía-.Mientras, elBanco Central Europeoya ha dado un primer aviso de loque se avecina: está articulando un mecanismo de respuesta inmediato ante el temor a que, de mantenerse la inflación alta, y con la subida de tipos de interés como primera receta para contener la inflación, España tenga -al igual que Italia- serias dificultades para hacer frente a sus compromisos por el elevado nivel de endeudamiento, sobre todo del sector público. Es más, las medidas aprobadas en elConsejo de Ministrosvan orientadas precisamente a seguir elevando esa deuda, mientras que la recaudación fiscal crece no tanto por un aumento de la actividad como por el factor perverso de esa inflación, que encarece el coste de bienes y servicios.Escudarse en la guerra de Ucrania como que es la culpable de todo no es de recibo. Esas tensiones inflacionistas existían ya antes de la invasión de Ucrania por Rusia. Y es cierto que esa operación ha acentuado la escalada por su impacto en el coste del gas, pero recordemos que el suministro energético de España no depende directamente de Rusia, con el añadido de que los países que sí están con ese problema ya están diseñando y aplicando planes de ajuste. Aquí, como se ve, es todo lo contrario, seguimos mirando la luna.
Algeciras, 4 de julio de 2022
Patricio González
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- Sabemos que la política tiene mucho de arte escénica, y son comprensibles los juegos que se establecen para alcanzar el poder o conservarlo. Pero se supone que esa búsqueda del poder es un mediopara tratar de llevar adelante un proyecto colectivo; lo que ya no es de recibo es que el juego político (a menudo con trampas de fulleros)se convierta en la única actividad que ocupe las horas y las energías de quienes son depositarios de la confianza a través del voto.El 26 de septiembre de 1960 cambió la manera de hacer política el primer debate electoral televisado entre candidatos a la Casa Blanca;se enfrentaron JFK, aspirante demócrata, y Richard Nixon, vicepresidente del saliente Eisenhower, y casi cantado el siguiente ocupante del Despacho Oval. Pero la elegancia de JFK, su traje cortado a la última, su sonrisa envolvente y el dominio del espacio escénico hicieron que Nixon, el supuesto ganador, desapareciera del mapa. Según los biógrafos de ambos, pocos de los que esa noche cambiaron su voto a favor de JFK recuerdan cuál fue el argumento político, económico o social que les influyó; fue la puesta en escena, la imagen, y, por si fuera poco, salía en los reportajes junto a una Jackie arrasadora. Nixon perdió en una noche toda la ventaja que acumulaba.Y ya fue así a partir de entonces en todo Occidente, la imagen pesa mucho, y, por desgracia, la política se ha convertido en un esmerado trabajo para iluminar la imagen del líder o la lideresa, al tiempo que resulta vital opacar o ensuciar la de los oponentes. Por ello, los medios de comunicación, en lugar de ser lo que fueron en un principio (El Cuarto Poder), han pasado a ser voceros de una línea política y económica, que engancha con determinadas fuerzas políticas. Las políticas de comunicación han pasado a tomar la cabeza del pelotón, y ya es casi menos importante qué se nos vende que la manera de hacernos llegar el mensaje. Por eso es frecuente oír frases como que tal gobierno no ha sabido trasladar a la ciudadanía lo bien que lo ha hecho.Y ahora estamos en un batiburrillo de políticas comunicativas que son las que al final siempre se llevan el gato al agua. Sabemos de la guerra de Ucrania, que tanto nos está afectando en todos los órdenes, lo que quieren que sepamos, y la impresión es que se pasan el día improvisando. Montan un festival mediático con la Cumbre de la OTAN en Madrid, porque se trata de subir la moral a los propios y añadir opiniones a favor, como si fuera necesario armar semejante circo, cuando lo que vaya a salir de eso que llaman refundación ya lo saben. Es una puesta en escena, aunque cueste millones y bien pudieran resolverlo por teléfono o videoconferencia (que es así como ya lo habrán hecho). A Madrid acuden a firmar y a salir en los medios, que es lo que cuenta.
- Por aquí andamos igual. Nadie sabe por qué Sánchez Cambió la política española con respecto al Sahara y Marruecos, pero está claro que es una nueva improvisación. ¿Estaba en las conversacionescon el Rey de Marruecos alguna frase que pueda explicar la masacre de subsaharianos que se ha perpetrado en la frontera de Melilla y la zona marroquí de Nador? Encima ocurre en las inmediaciones del Monte Gurugú, de sangrienta memoria en la Guerra de África de hace un siglo. El ministro Albares es como una sombra difusa que no cambia de expresión facial pase lo que pase; hombre, ya que se trata de un juego escénico, ponga algo de su parte, señor ministro, que un día de estos se va a quedar dormido mientras habla.Si el argumento es siempre pura improvisación y la puesta en escenaencima es lamentable, no irán a pretender que nos creamos las historias que nos cuentan. Y pasa lo mismo con lo que llaman extrema derecha o extrema izquierda. Tampoco los nacionalismos, que ya sabemos a qué juegan vascos y catalanes (todo tiene un precio en dinero); Están casi todas las cartas boca arriba y aun así intentan contarnos milongas. Ni unos ni otros, Kennedy por lo menossabía vestir y sonreía, y con esa imagen tan espléndida casi nos hace volar por los aires durante la crisis de los misiles en Cuba. Pues si nonos creemos ni a JFK, menos vamos a creerlos a ustedes. Ni siquierasaben mentir. Digan que la cosa se les ha ido de las manos, y no sigan tratando de liarnos con mentiras que, como en este caso, se ven de lejos porque, ya saben, los números son tozudos.Algeciras, 30 de junio de 2022
- TODO SON MENTIRASSabemos que la política tiene mucho de arte escénica, y son comprensibles los juegos que se establecen para alcanzar el poder o conservarlo. Pero se supone que esa búsqueda del poder es un mediopara tratar de llevar adelante un proyecto colectivo; lo que ya no es de recibo es que el juego político (a menudo con trampas de fulleros)se convierta en la única actividad que ocupe las horas y las energías de quienes son depositarios de la confianza a través del voto.El 26 de septiembre de 1960 cambió la manera de hacer política el primer debate electoral televisado entre candidatos a la Casa Blanca;se enfrentaron JFK, aspirante demócrata, y Richard Nixon, vicepresidente del saliente Eisenhower, y casi cantado el siguiente ocupante del Despacho Oval. Pero la elegancia de JFK, su traje cortado a la última, su sonrisa envolvente y el dominio del espacio escénico hicieron que Nixon, el supuesto ganador, desapareciera del mapa. Según los biógrafos de ambos, pocos de los que esa noche cambiaron su voto a favor de JFK recuerdan cuál fue el argumento político, económico o social que les influyó; fue la puesta en escena, la imagen, y, por si fuera poco, salía en los reportajes junto a una Jackie arrasadora. Nixon perdió en una noche toda la ventaja que acumulaba.Y ya fue así a partir de entonces en todo Occidente, la imagen pesa mucho, y, por desgracia, la política se ha convertido en un esmerado trabajo para iluminar la imagen del líder o la lideresa, al tiempo que resulta vital opacar o ensuciar la de los oponentes. Por ello, los medios de comunicación, en lugar de ser lo que fueron en un principio (El Cuarto Poder), han pasado a ser voceros de una línea política y económica, que engancha con determinadas fuerzas políticas. Las políticas de comunicación han pasado a tomar la cabeza del pelotón, y ya es casi menos importante qué se nos vende que la manera de hacernos llegar el mensaje. Por eso es frecuente oír frases como que tal gobierno no ha sabido trasladar a la ciudadanía lo bien que lo ha hecho.Y ahora estamos en un batiburrillo de políticas comunicativas que son las que al final siempre se llevan el gato al agua. Sabemos de la guerra de Ucrania, que tanto nos está afectando en todos los órdenes, lo que quieren que sepamos, y la impresión es que se pasan el día improvisando. Montan un festival mediático con la Cumbre de la OTAN en Madrid, porque se trata de subir la moral a los propios y añadir opiniones a favor, como si fuera necesario armar semejante circo, cuando lo que vaya a salir de eso que llaman refundación ya lo saben. Es una puesta en escena, aunque cueste millones y bien pudieran resolverlo por teléfono o videoconferencia (que es así como ya lo habrán hecho). A Madrid acuden a firmar y a salir en los medios, que es lo que cuenta.
- Por aquí andamos igual. Nadie sabe por qué Sánchez Cambió la política española con respecto al Sahara y Marruecos, pero está claro que es una nueva improvisación. ¿Estaba en las conversacionescon el Rey de Marruecos alguna frase que pueda explicar la masacre de subsaharianos que se ha perpetrado en la frontera de Melilla y la zona marroquí de Nador? Encima ocurre en las inmediaciones del Monte Gurugú, de sangrienta memoria en la Guerra de África de hace un siglo. El ministro Albares es como una sombra difusa que no cambia de expresión facial pase lo que pase; hombre, ya que se trata de un juego escénico, ponga algo de su parte, señor ministro, que un día de estos se va a quedar dormido mientras habla.Si el argumento es siempre pura improvisación y la puesta en escenaencima es lamentable, no irán a pretender que nos creamos las historias que nos cuentan. Y pasa lo mismo con lo que llaman extrema derecha o extrema izquierda. Tampoco los nacionalismos, que ya sabemos a qué juegan vascos y catalanes (todo tiene un precio en dinero); Están casi todas las cartas boca arriba y aun así intentan contarnos milongas. Ni unos ni otros, Kennedy por lo menossabía vestir y sonreía, y con esa imagen tan espléndida casi nos hace volar por los aires durante la crisis de los misiles en Cuba. Pues si nonos creemos ni a JFK, menos vamos a creerlos a ustedes. Ni siquierasaben mentir. Digan que la cosa se les ha ido de las manos, y no sigan tratando de liarnos con mentiras que, como en este caso, se ven de lejos porque, ya saben, los números son tozudos.Algeciras, 30 de junio de 2022