El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y miembros de la Corporación Municipal han recibido en el Salón de los Espejos del Ayuntamiento, al grupo de 35 niños y niñas saharauis que han viajado a Málaga para pasar el verano.
La Asociación Malagueña de Amigos del Pueblo Saharaui organiza, junto con FANDAS-Sahara y el resto de las asociaciones de Andalucía, el proyecto Vacaciones en Paz, trayendo un total de 81 menores saharauis a la provincia de Málaga, de los cuales 15 serán acogidos por familias de Málaga capital, durante los dos meses de julio y agosto. En Andalucía son 1.300 los menores que se han desplazado desde el desierto de Sahara.
Este programa profundiza en las relaciones de amistad del pueblo andaluz con el saharaui, además de mejorar la calidad de vida, tanto sanitaria como alimenticia, de la población infantil saharaui. Estos niños están obligados a sobrevivir exiliados junto a sus familias, unas 200.000 personas en total, desde hace 40 años en unos campamentos de refugiados.
Durante su estancia, amplían y completan los conocimientos educativos que adquieren en los colegios en los campamentos de refugiados, intentado paliar el desconocimiento de las condiciones del desarrollo moderno, con el fin de que tengan una concepción del mundo lo suficientemente amplia y sólida, dentro de su proceso de maduración personal, y todo ello, sin apartarlos de la rica tradición de su pueblo.
Desde hace varios años, el Ayuntamiento, a través del Área de Participación Ciudadana, Inmigración y Cooperación al Desarrollo, participa en la realización de este proyecto. Este año ha aportado al mismo 8.000 euros a través de un convenio de colaboración entre la Asociación Malagueña de Amigos del Pueblo Saharaui y el Ayuntamiento.
La situación de crisis económica hace que este programa de solidaridad con los menores esté atravesando una situación complicada, pero gracias al compromiso de las entidades públicas y de las familias de acogida todavía puede hacerse realidad.