Tragedia, aventura y amor se mezclan en la leyenda del que fuera el más conocido bandolero de la Sierra de Cádiz, José María el Tempranillo. Su historia y la de su mujer, María Jerónima Francés, en la sucesión de días que cambiaron para siempre su destino, se recrean este fin de semana en Grazalema.
Son ya diez los años que este municipio gaditano viene celebrando la recreación histórica Sangre y amor en la Sierra, consolidándose la cita como uno de los grandes atractivos turísticos de la comarca y convirtiéndose en un referente en materia de recreaciones.
Así, las calles del municipio se llenarán de bandoleros, artesanos y taberneros que, ataviados con ropajes de la época, trasladarán a los visitantes al año 1832, en lo que el alcalde de Grazalema, Carlos Javier García, describe como una experiencia global.
La recreación, que se prolongará desde el viernes 7 hasta el domingo 9, está organizada por la Asociación Bandoleros de Grazalema y el Ayuntamiento del municipio, contando además con la colaboración de la Diputación de Cádiz.