«Algeciras ha perdido cinco años para contar con un proyecto de acceso sur. Landaluce rechazó el acuerdo que se encontró hecho entre el Ayuntamiento, la Autoridad Portuaria y el Ministerio de Fomento, lo que obligó a rehacer toda la tramitación administrativa», han indicado desde el PSOE de la localidad.
Landaluce solo ha pensado en su interés político personal, no en el interés general, como ha hecho con muchos temas de Algeciras, y ahora está desacreditado para defender este proyecto, un proyecto que preocupa a vecinos de Pastores, Los Guijos, Las Herrizas, La Juliana y El Cobre, principalmente, afirma el concejal socialista, Fran Fernández.
Está haciendo lo mismo que con el acceso Norte o con el nudo de Pajarete, o con la apertura de edificios que se encontró hechos cuando llegó a la alcaldía, retrasar su apertura o volver a tramitarlos porque no quería que fueran conocidos como cumplimientos del PSOE. Esta forma de hacer las cosas daña los intereses generales de los ciudadanos, añade Fran Fernández.
El Grupo Municipal Socialista va a celebrar una ronda de reuniones con las asociaciones vecinales de las zonas más afectadas por el acceso Sur para confrontar su opinión sobre el proyecto final. Algunas de estas entidades ya ha expresado en los últimos días que no cuentan con información oficial sobre el proyecto definitivo, que si se ejecuta puede dejar aisladas algunas zonas de barriadas como Pastores.
Lo único que hace Landaluce es mover papeles y buscar fotos y titulares de prensa, pero no hay obras ni en las carreteras ni en las vías del ferrocarril. Ni antes como diputado, ni ahora como senador, ha conseguido beneficios para los algecireños, solo ha dañado los intereses de los ciudadanos con la reforma laboral, la dependencia o metiendo mano a la hucha de las pensiones. Así es el PP, declara el concejal socialista.
«Para lo que tiene prisa Landaluce es para colocar carteles en la calle Tarifa o en la obra del colector, donde su mayor preocupación es seguir defendiendo a su partido en la mala gestión que ha hecho del dinero de todos los ciudadanos en unas obras que nunca terminan, y cuya financiación y adjudicación está siendo investigadas, concluye Fran Fernández.