El Gobierno de Gibraltar toma nota, con decepción, de la objeción del Parlamento Europeo, en el día de hoy, a la entrada en vigor de la decisión de la Comisión Europea de retirar a determinadas jurisdicciones, entre ellas Gibraltar, de la lista de la UE de terceros países de “alto riesgo” con deficiencias estratégicas en materia de prevención del blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo (“PBC/FT”).
La decisión de la Comisión Europea de retirar a Gibraltar de la lista de la UE se produjo tras la decisión del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), en febrero de 2024, de hacer lo mismo de su propia lista de “Jurisdicciones sometidas a mayor vigilancia”.
Cabe recordar que la decisión del GAFI con respecto a Gibraltar se produjo tras un período de intenso análisis técnico y evaluación meticulosa de todos los aspectos del régimen de PBC/FT de Gibraltar, incluida una visita de verificación a Gibraltar realizada por evaluadores del GAFI en diciembre de 2023.
Adicionalmente, se entiende que la decisión de la Comisión Europea de retirar a Gibraltar de la lista de la UE se produjo tras una consulta –basada en pruebas– al Grupo de Expertos en Blanqueo de Capitales y Financiación del Terrorismo de la Comisión Europea. El Gobierno señala que la Comisión defendió con firmeza esta postura al inicio de la sesión plenaria del Parlamento Europeo celebrada hoy en Estrasburgo.
Por contra, está claro que la opinión del Parlamento Europeo no es el resultado de ninguna evaluación técnica. Tampoco es producto de ninguna evaluación o análisis detallado de la labor de las autoridades gibraltareñas. Más bien, se trata de una postura envenenada por la política, promulgada por actores hostiles del Partido Popular, Vox y Ciudadanos dentro del Parlamento Europeo, incluido el eurodiputado José Manuel García‐Margallo. Esto no ha sido ninguna sorpresa.
No obstante, el Gobierno sigue seriamente preocupado por la única referencia a Gibraltar en la parte sustantiva de la objeción, que sugiere que Gibraltar ha facilitado la evasión de las sanciones impuestas a Rusia.
Esta ficción no podría estar más lejos de la realidad, dada la serie de actividades coercitivas de gran notoriedad y ampliamente difundidas que se han llevado a cabo en Gibraltar con respecto a los activos en poder de personas designadas en cumplimiento de los Regímenes de Sanciones tanto del Reino Unido como de la UE, este último aplicado enérgicamente en Gibraltar, de forma totalmente voluntaria, como resultado de una decisión unilateral adoptada por el Gobierno de Gibraltar. Esta acusación sin fundamento, totalmente infundada y gratuita, refleja por sí misma el valor que debe darse a la decisión del Parlamento Europeo.
El Gobierno no permitirá que el buen nombre de Gibraltar se asocie, ni remotamente, con los esfuerzos para apoyar la agresión bélica de Rusia contra Ucrania y, por lo tanto, planteará esta reclamación al más alto nivel político.
El Gobierno pedirá a la Comisión Europea que tome de nuevo la decisión de retirar a Gibraltar de la lista de la UE, y espera que esta decisión se tome con prontitud.
Para disipar toda duda, ninguno de estos acontecimientos influye en la posición razonada y ponderada del GAFI sobre Gibraltar, lo que significa que Gibraltar seguirá fuera de la lista del GAFI. Estos hechos tampoco afectan a las negociaciones en curso sobre la futura relación de Gibraltar con la UE. Y nada de esto disuadirá a Gibraltar de continuar con entusiasmo su excelente labor de aplicación de su régimen de PBC/FT de categoría mundial ni de apoyar activamente a sus socios, incluida la UE, en cuestiones geopolíticas como la guerra en Ucrania.